1. El calvario de Luciana (11)


    Fecha: 22/12/2019, Categorías: Fetichismo Autor: señoreduardo, Fuente: CuentoRelatos

    ... violenta excitación, comenzó a retorcerse en la cama y a gritar hasta que por fin, coincidiendo con un fuerte pellizco del cliente en uno de sus pezones, estalló en un orgasmo interminable que ella acompañó con una música hecha de jadeos, gemidos y gritos hasta quedar quieta, saciada, en calma.
    
    Pero poco iba a durarle esa calma, porque el espectáculo de la masturbación había puesto otra vez en forma al cliente, que se sentó y recostándose contra el respaldo de la cama dijo:
    
    -Vamos, perrita, me pusiste al rojo vivo con esa paja que te hiciste, así que a trabajar, vamos, a chupármela otra vez. –y Luciana lo hizo. Se arrodilló entre las piernas del hombre, tomó la pija erecta y dura con su mano derecha y se la metió en la boca. De inmediato fue presa de esa sensación placentera que experimentaba siempre que hacía una fellatio, y se aplicó a la tarea. Le demandó casi media hora de mamar y lamer conseguir que el cliente acabara, y fue con un par de chorritos escasos, el segundo luego de un intervalo tras el primero. Sin duda la mamoncita había extraído hasta la última gota de semen de esa verga.
    
    El hombre lanzó un prolongado suspiro y satisfecho y agotado se quedó dormido enseguida. Segundos más tarde Luciana también se sumergía en un sueño tan profundo como un abismo sin fondo.
    
    ……………
    
    A las once de la mañana siguiente, un rozagante Víctor W. conversaba con Emilia en el saloncito, ambos ante sendos pocillos de café.
    
    -Ha sido una noche inolvidable, mi estimada ...
    ... señora. –dijo el hombre con una amplia sonrisa de satisfacción.
    
    -Me alegra sobremanera que lo haya pasado bien, mi querido señor.
    
    -¡¿Bien?!... ¡Ha sido una noche gloriosa, Emilia! Luciana es indudablemente la mejor, lejos, de todas las putitas que he conocido aquí.
    
    -Coincido, Víctor. Esa jovencita ha sido un gran hallazgo. Y dígame, ¿se portó bien? ¿fue una perrita obediente?
    
    -¡Se portó muy bien, Emilia! Claro que sí, han hecho ustedes un gran trabajo con ella; bueno, como con todas las anteriores, evidentemente cuentan con un mecanismo muy bien aceitado. Y ahora, si me permite me retiro, mi querida señora, me espera mucha tarea en la oficina, pero le ruego que vuelva a agendarme un turno y me avise cuándo podré volver por aquí.
    
    -Delo por hecho, mi estimado señor. Lo agendaré y mi fiel Elba se comunicará con usted para informarle que día tendremos el gusto de su presencia.
    
    Se despidieron con un apretón de manos y después Luisa, de acuerdo con las normas de cortesía de la mansión, lo acompañó hasta el sector de cocheras, donde el empresario había dejado su automóvil.
    
    ……………..
    
    En el momento en que el cliente atravesaba el portón con su vehículo sonaba el celular de Emilia. La proxeneta vio que se trataba de Graciela y decidió que ya era tiempo de atenderla.
    
    -Hola, perra callejera. –dijo y advirtió, complacida y excitada, que su esclava respiraba agitadamente.
    
    -Por fin, Ama… -pudo decir después de unos segundos.
    
    -Por fin, ¿qué?
    
    -Digo que… que ...