1. Una comida familiar muy especial


    Fecha: 28/01/2020, Categorías: Anal Primera Vez Hardcore, Autor: Rain1744, Fuente: xHamster

    ... empapado miembro entre sus tetas, ella cerró sus pechos presionando mi polla y empezó a agitarlos de arriba a abajo. Yo le tenía pellizcados sus duros pezones y ella incrementaba la velocidad de sus tetas sobre mi polla mientras me miraba de una forma muy perversa. -"Tienes una polla muy caliente, cerdo". Su forma de hablar ya no me parecía inapropiada.Tras esa cubana apoteósica, la levanté con violencia y le quité esos pantalones-falda hippie. Para mi sorpresa, no llevaba bragas. La obligué a ponerse a cuatro patas apoyando sus brazos en el lavabo y le dije que abriera sus piernas, se espatarró y yo me agaché para ver cómo tenía su coño. Obviamente, ya estaba muy mojado. Se lo chupé levemente y le pasé un par de dedos para cerciorarme de que estaba más que preparado. Mi polla ardía. Le pasé el capullo por sus labios vaginales, ella estaba súper excitada. A la tercera vez, se la metí dentro. Su joven coño se abrió rápidamente y ella tuvo que elevarse sensiblemente al notar el paso de mi dura y mojada polla. Deposité mis manos sobre sus caderas y empecé a bombear con relativa violencia y con gran ritmo. Ella emitía gemidos demasiado pronunciados y le tuve que tapar la boca con una mano mientras le susurré -"No grites, puta. ¿No querías mi polla? Aquí tienes mi polla, guarra". También le indiqué -"No querrás que nos pillen, ¿verdad? Debes callarte".Mi excitación era máxima. Ella ya se controlaba un poco más y, entonces, me chupé un dedo y empecé a meterlo en su ano. Necesitaba ...
    ... abrir otra vía. Ella, al principio, me dijo que por ahí no quería. Yo traté de convencerla, pero se negaba. Le dije que era demasiado puta como para negar ciertas cosas. Ella no supo qué decir por primera vez, entonces accedió. Ya tenía luz verde y empecé a trabajar su ano con mis dedos mientras seguía bombeando su coño.Cuando lo creí suficientemente abierto, saqué mi polla de su coño y empecé a rodear su ano. Ella estaba tensa. -"¿Nunca te han follado el culo? Ella negó con la cabeza. Empecé con la puntita y poco a poco fui introduciendo mi venosa polla. Ella ya tenía una toalla en la boca para no gritar. Empecé a agitar mi cuerpo y en cada empujón ella se rompía de dolor. Su cara en el espejo me excitaba todavía más. La golpeé varias veces sus preciosas nalgas y noté como eso la ponía más cachonda. Los dos ya estábamos empapados de sudor. Su virgen culo tenía que ser llenado de leche. Noté la presión y la falta de oxígeno, sin duda, me quedaba poco. En uno de los últimos empujones más agresivos le vertí toda mi leche en su culo. Mi semen se desparramó por todo su culo, ni siquiera mi mujer me permitía correrme dentro, pero este caso era diferente. Ella empezó a temblar y la tuve que abrazar para tranquilizarla. Mi corrida fue bastante épica.Acto seguido me senté sobre el retrete para tomar un respiro, mientras ella intentaba limpiarse. Solo decía que le había gustado. Mi sorpresa fue tal, que ya con la polla un tanto flácida ella se puso de rodillas delante de mí y empezó a ...