Ayudando a mi hermana a rasurarse
Fecha: 25/02/2020,
Categorías:
Infidelidad
Autor: orestes santoyo, Fuente: CuentoRelatos
... con la toalla mi rostro, de mi herramienta escurría líquido, en cuanto la tome en mis manos y casi sin movimiento goce, tres o cuatro chorros de mi esperma fueron a las piernas y vientre de mi hermana, dos o tres mas aunque menores cayeron en sus muslos y rodillas, me levante totalmente y a una indicación de mi hermana, acerque mi herramienta a su boca y se contentó con seguirla chupando.
Me tendí al lado de mi hermana, no lo podía creer, era una experiencia alucinante, casi irreal, como si no acabara de vivirla, empecé a recordarla y revivirla, mi herramienta increíblemente seguía dispuesta apuntando al techo, pocas veces con mis amigas y amantes ocasionales había mantenido una excitación así, Salí de la ensoñación cuando la mano de mi hermana me toco en el brazo, deslizo sus dedos suavemente a todo lo largo a su alcance, regresaba acariciando y apretando con ternura, dejo mi brazo y empezó a recoger la leche que escurría de sus muslos y vientre, como podía acercaba la mano a sus labios y lamia sus dedos, esa acción volvió a enloquecerme, me acerque a ella y empezamos a devorar nuestras bocas en unos besos increíbles, nuestras lenguas alternaban la invasión de una boca u otra, intercambiábamos salivas y mi sabor, me deslice hacia abajo y descubrí sus senos subiendo su sudadera, lamí y mordí hasta tener ambos pezones totalmente erectos y tan duros que parecían pedazos de pan endurecido, cuando los gemidos de mi hermana eran más intensos, volví a su vagina y la devore ...
... hasta borrar cualquier rastro de mi semen, volvía a besar su boca de vez en vez, mis manos alternaban el masaje a sus senos.
No pare de comerla hasta que gozo nuevamente con igual intensidad.
Platicamos por horas, me confeso que era fanática de la masturbación, quien hubiera pensado, siempre acostumbrada a hacerlo mientras miraba porno, de hecho su colección era mucho mayor a la mía, nunca había pensado en el incesto pero juzgaba la experiencia como increíble, maravillosa e indudablemente la mejor de su vida,
Yo por mi parte le confesé la evolución de mis gustos y preferencias sexuales, le conté como deje de interesarme en mujeres mayores toda vez que creía haber aprendido lo suficiente, le conté de mis ligues y de mis folla amigas.
Ella se mantenía virgen en cuanto al contacto con un hombre aunque ya se había penetrado con un miembro artificial que había comprado hacía dos años, dijo que mi miembro era más grande que aquella replica que tenía en su recamara escondido.
Mi hermana y yo mantuvimos relaciones así, hasta que le removieron sus enyesados, siempre aprovechábamos el baño y el rasurado, me fui haciendo un experto, una tarde también me rasure totalmente, para entonces su técnica para comerme había mejorado totalmente por lo que muchas veces nos complacíamos en deliciosos 69.
Estamos planeando el momento de su relación completa conmigo, ahora de vez en vez le meto los dedos lo que le produce orgasmos más largos y duraderos, pensamos seguir viviendo juntos, ...