Mi primera vez fue con un maduro
Fecha: 16/03/2020,
Categorías:
Incesto
Autor: Loliita, Fuente: CuentoRelatos
... para variar. La siguiente semana estuvo muy tranquila, el mismo cliente de la semana pasada estuvo yendo a comer y siempre ordenaba en mi caja el mismo paquete. Mis compañeros le apodaban Mr. Cuatro y decían que era cliente frecuente y al parecer se le notaba en la panza, sin embargo, siempre dejaba propina y muy buena, por lo que siempre lo consentían con alguna nieve o malteada gratis.
El sábado me quede a cerrar junto con otros tres compañeros, cuando estábamos a punto de cerrar el autoservicio llego un cliente. Como nunca había atendido el autoservicio uno de mis compañeros me dejo tomar la orden. Era el mismo procedimiento que en la caja así que no fue difícil, la persona del otro lado ordeno una nieve sencilla y le dije que pasara a la siguiente ventanilla.
Cuando bajo el vidrio era el mismo cliente que había atendido estos últimos días, Mr. Cuatro. –Hola, buenas noches mister… digo señor, aquí está su orden –le dije.
-Vaya, pero si eres tu lolita –me dijo Mr. Cuatro- ¿tan tarde y trabajando?
Me extraño que se refiriera a mí de esa forma, solo mis amigos me llaman así. Pero no le di importancia y le conteste –si hoy me toca cerrar.
-Que bien, veo que ya atiendes ahora el autoservicio, eres muy inteligente –me decía mientras me miraba fijamente
-¿a qué hora cierran? –me pregunto.
-cerramos dentro de 10 minutos (ósea a las 11 PM)
-Perfecto Lolita, entonces nos vemos después, me dio gusto que me atendiera mi cajera favorita. Y sin decir más se ...
... retiró.
Cuando por fin cerramos, nos pusimos a limpiar lo que hacía falta, lo cual no era mucho. Y terminamos saliendo a las 11:30 PM. Los demás como vivían cerca se fueron caminando y yo me fui a tomar un taxi a la parada del centro comercial, para ser sábado por la noche la calle estaba un poco desolada y la ausencia de taxis hacia que me diera un poco de miedo estar sola esperando. A los 10 minutos de estar esperando decidí marcarles a mis padres para que pasaran por mí, pero recordé que salieron de viaje de negocios y no se encontraban en la ciudad.
De pronto escuche que pitaban del estacionamiento del centro comercial, cuando volteé vi que me hacían señas, pero decidí que era mejor ignorarlas. Después escuche que me gritaba una voz conocida –Lolita ¿qué haces ahí sola esperando un taxi? Ven que yo te llevo a tu casa. Cuando volteé era Mr. Cuatro quien me gritaba. Fui caminando hacia su carro y me volvió a decir que el me llevaba a mi casa. Pensé en no aceptar su invitación pero tampoco quería estar ahí sola, así que acepte su invitación y me subí a su carro.
El poco trayecto que duramos fue muy incómodo, ninguno de los dos hablaba y menos yo que no tenía mucha confianza. Hasta que paramos en un semáforo Mr. Cuatro rompió el silencio.
–Me imagino que traes prisa de llegar a casa verdad, de seguro saldrás con tus amigos. Sin pensar mucho le conteste.
–No, para nada, no me invitaron a ningún lado.
–En serio Lolita, ni tu novio. –me pregunto Mr. Cuatro.
–No ...