Una cena para la eternidad
Fecha: 25/04/2020,
Categorías:
Sexo en Grupo
Autor: cliksexy, Fuente: RelatosEróticos
... tercera pareja de la noche, la televisiva, estaba follando. El se había sentado en el sillon, ahora ya desnudo. Ella solo vestida con unas medias oscuras, el ligero a juego con el tanga que ya no llevaba y un collar de perlas enorme, de dos vueltas, adornando su cuello y cayéndole entres sus perfectas tetas que estaban semitapadas por una melena negra ondulada preciosa, botaba con firmeza sobre su polla, clavándosela entera, desde la punta hasta los huevos. Tenía unos pezones no muy grandes, pero marcadísimos y un coño totalmente rasurado a excepción de una fina línea que dividía en dos su monte de venus. No tardo en sacarse la polla de su coño, totalmente bañada en los flujos de su orgasmo, y sentada encima de él lo masturbó unas cuantas veces hasta que los primeros chorros de leche fluyeron hasta su abdomen, cayéndo hasta su monte de venus, mientras que las sobras iban rebosando en su mano, que aún agarraba con ganas ese enorme trozo de carne.
El ambiente pasó el límite permitido. Entre el calorcito agradable de la chimenea, las copas que acumulábamos y la visión de la película se hizo la mezcla imposible de evitar. Yo había subido mi mano poco a poco por el muslo de mi mujer y me había percatado que las medias eran de liga, llegué a su entrepierna y note su tanga de encaje que supuse el negro, lo aparte e introduje mi dedo corazón en su coño y entró a la perfección, entre un mar de flujo. Lo saqué y disimuladamente me lo lleve a la boca para saborear la miel con que me ...
... deleita en cada sesión de sexo. Lalo pasaba su mano por las tetas de su mujer, deteniéndose en sus pezones que se salían de la camisa. Lola dejo el cubata en la mesa y dijo:
- Vamos a ver. Ya somos todos mayorcitos. Yo estoy cachondísima y estoy deseando meterme la polla de mi marido en la boca y se que vosotros tres estais igual de calientes que yo, así que cada uno haga lo que crea.-
Y dicho esto desabrochó el pantalón de Lalo, apartó el boxer y le saco la polla. La verdad tenía una buena polla, no la del nota de la peli, pero considerable. Lola comenzó a masturbarla suavemente, acariciando sus huevos y despues de humedecerse los labios comenzó a besar a su marido. Tras un buen beso de pasión se agachó y se la metió hasta la garganta, comenzando un sube y baja acompasando su cabeza y su mano. Lalo se estiró hacia atrás en el sofa, estremeciéndose por la chupada. El espectáculo era tremendo. Yo había metido ya la mano entre los muslos de mi mujer sin disimulo y la estaba masturbando, tocando su clítoris y metiendo un par de dedos en su empapadísimo coño. Lola se puso más cómoda y apoyo una pierna en el suelo y otra en el sofá, con lo que nos puso el culo en pompa para nosotros y con el tanga asomando por su filo. Mi polla estaba ya a reventar lo cual notaba a la perfección mi mujer porque la sobaba con ganas por encima del pantalón. Yo le subí el vestido hasta la cintura y le abrí las piernas para hacerle la paja mejor lo cual hizo que Lalo tuviera una visión del coño ...