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Una para muchos más (un gangbang para Fernanda)
Fecha: 26/04/2020, Categorías: Gays Autor: Mamaceando, Fuente: CuentoRelatos
... aflojó la morra! —NO QUE NOOO! —Si se ve que es bien putita la güera! Varias manos la empujaron hasta el piso. Mientras todos se arremolinaban sobre ella, sintió miedo. Pero no sabía cómo detener aquello. Y una verga sudorosa y sucia chocó en sus labios. —Abre la boquita mami, abre… abre… ándele. Cuando sintió el trozo de carne en su boca pudo saborear el sudor, y la mugre. Apenas pudo sentir asco cuando otra verga entro y sintió lo mismo. —Ahora yo. —Nel, me toca. Fernanda mamaba verga tras verga. Y con sus manos masturbaba a las que estuvieran cerca. Vergas pequeñas, grandes. Entraban en su boca. Fernanda seguía llevándolas hasta el fondo. —Irá, tienes que agarrarle el pelo pa’ verle su carita. —Hija de su puta madre, chupa bien rico. —Abre los ojos culera! —Pa’ que veas lo que te comen güerita! Fernanda esbozaba una leve sonrisa, y chupaba como u pura cada verga que le llegaba, hasta dejarlas bien babeadas. Pasaba su lengua por los guevos de todos esos desconocidos. Y pedía más. —¿Ves como si pinche Fer? —Pueeeg si quiero más verga. Kevin le empujó la verga hasta el fondo y ella parecía querer más, tomaba un poco de aire y volvía a meterse la verga hasta el fondo. Luego otro tomó el lugar de Kevin y también la empujó hasta el fondo. —Hija de la verga, esta pinché vieja es una champions! —Ven, metete esta hasta el fondo. —¿y apoco nada más me la va a mamar? —¡¿pus’ que querías más?! —¿Ya le viste el ...
... pedorro? En cuanto escucho el murmullo generalizado, sonó una rasgadura. Su vestido estaba siendo destrozado. Se sacó la verga de la boca y llena de baba les dijo: —Nada más hubieran bajado el cierre, ya lo rompieron. —Cállate y sigue mamando. Le abrieron las piernas y su hermoso culo quedó expuesto ahí a medio patio. Unas nalgas hermosas con una tanga negra. —Iranomas! —Yo pido manos! —tras pendejo… voy yo. Al final un señor los quito se info tras ella. Le hizo de lado tanga y acomodo su verga. —¡Este es el cielo putitos! —Órale culero ya me toca! Fernanda solo gemía, pero no paraba de chupar vergas. Y mover las caderas. Chocaba contra la panza de aquel tipo y luego sintió a otro. —Ora si vas a sentir un cabron mamacita! —Órale culero que sigo yo! Cuando Fernanda giro la cabeza, vio una fila esperando turno para cogérsela y otros tantos esperando verga en mano a que se las chupara. Entre ellos Kevin. —Namas porque no nos trajimos a todos los que te chulearon las nalgas, sino seríamos más” —¿CUUUAGGGTOOOSS SOOON? —Ora veras dos, cuatro y cinco. Nueve y tres. Quince culeros mi Fer. Un chaparrito se colgó de su cuerpo, sobre su espalda y comenzó a babearle el ano, enseguida Fernanda comenzó a gemir. —Si papi, chupame mi colita. Y siguió mamando vergas. Y gimiendo. Luego el chaparrito desapareció. Cuando volvió, traía una colcha. —Ahí les va la verga putos. Le metió la verga en la boca a Fernanda y ella chupo sin dudarlo. ...