Era criada y la convirtieron en puta (Segunda parte)
Fecha: 27/04/2020,
Categorías:
No Consentido
Autor: Aldebaran, Fuente: CuentoRelatos
Para Lara, mi más fiel lectora.
Lola se levantó al día siguiente temprano. Quería olvidar lo que había ocurrido, y pensar que todo lo que le ocurrió era una pesadilla, pero no era así. Tras desayunar, hizo lo propio para sus señores, Manuel y Josefina. Por un momento se le pasó por la cabeza contarle a Josefina lo que su marido había hecho con ella, pero luego se contuvo. Estaba segura de que la despedirían si le decía algo.
Cuando hubo preparado todo, como ellos no bajaban, decidió llamar a su tía y contárselo.
-Tía, soy Lola. Le dijo. Tengo que contarte algo.
-¿Y qué es? Supongo que será importante para que me hayas llamado tan temprano.
-Es qué... me da vergüenza.
-Anda, no será para tanto. Cuéntame.
-Manuel ha abusado de mí.
-¿Qué dices? ¿Estás sola en casa?
-Sí, estoy sola, ¿por qué lo dices?
-Para que nadie te oiga. Mira, me ha costado mucho conseguirte este trabajo. Yo hablé personalmente con Manuel y al principio no quería darte el trabajo y al final accedió porque me dijo que tendría que follar con él para que te lo diera.
-¿Follar? ¿Qué es eso?
-Hija, pareces tonta. Follar es lo que ha hecho contigo. Es el poder que tienen los hombres de tomar lo que ellos quieren y hacer con una mujer lo que les dé la gana.
-Pero yo te vi a ti haciéndolo con un hombre aquella noche y no parecía que te obligase a nada.
-¿Estabas despierta esa noche? Vaya, pensé que te habías tomado las pastillas.
-No, no las tomé. No sabía que eran y las ...
... dejé allí.
-Estaba haciéndolo con Julián, el de la tienda a la que fuimos para comprarte la ropa. Una vez me acosté con él para pagar mi ropa, porque no tenía dinero, y aquella noche lo hice porque quería. Me apetecía follar con él para demostrar mi poder.
-Yo nunca pensé eso de ti. ¿Y el tío qué pensaría si se enterase?
-Tu tío solo me folla cuando le apetece. Me usa cuando quiere. Me levanta el camisón y me la mete sin más, sin excitarme primero y sin preocuparse si disfruto yo o no. Pero ahora tú tendrás que dejarte hacer si quieres seguir trabajando en esa casa.
-¡No, tía! ¡No voy a dejar que abusen de mí!
-Tienes que aceptarlo. Manuel tiene el poder y te usará cuando quieras, te guste o no.
-Pues entonces me iré de esta casa.
-¡Ni se te ocurra! ¡Manuel te buscará!
-Lo dices por algo, ¿eh? No volverá a follar contigo, seguro.
Ahora, por primera vez en su vida, había dicho la palabra follar.
Justo en ese momento, Manuel y Josefina bajaron la escalera y Lola tuvo que colgar el teléfono.
-Buenos días Lola, le dijo Manuel, veo que has preparado ya el desayuno.
-Las tostadas deben estar frías, volveré a calentarlas. Es que me levanté muy temprano y...
-Tranquila, no pasa nada. Le contestó Josefina. Esperaremos sentados.
Lola se puso a calentar las tostadas. Manuel no le quitaba ojo de encima. Se acercó a decirle algo al oído a su mujer. Esta asintió con la cabeza.
Más tarde terminaron de desayunar y Lola recogió los platos. Manuel ...