Cogiendo sin salir de casa
Fecha: 02/05/2020,
Categorías:
Hetero
Autor: insaciable, Fuente: CuentoRelatos
... motocicleta, Abraham me tiene bien penetrada a punto de darme su semen, me está bombeando mi vagina, no podemos parar para que el salga rápidamente de mi cuarto, el apura el paso para descargarme su semen, escuchamos cuando abre el portón del garaje, Abraham me comienza a disparar su semen cuando escucho a mi marido en la sala de la casa.
Me llama:
-Haydée, estas dormida.
No le puedo contestar porque estoy sintiendo la rica sensación del caliente semen recorriéndome las entrañas de mi vagina, estoy suspirando y no puedo hablar porque va a sospechar que estoy culeando. Nuevamente me llama:
-Haydée, que estás haciendo.
Abraham ya me descargó su semen y me tiene metida la verga en mi vagina sin moverse y le contesto a mi marido:
-Ya voy, Gerardo, estoy acomodando la ropa que lavó la señora ayer.
-Está bien, aquí te espero en la sala, voy a ver televisión, tal vez me preparas algo de comer.
-Está bien, cuando me desocupe salgo. Claro, podía salir cuando me desocuparan mi vagina.
Abraham se pone su ropa rápidamente, no puede salir porque mi marido está en la sala. Le digo:
-Abraham, escóndase bajo la cama, cuando traiga a mi marido a la cama para entretenerlo Ud. sale, yo le dejo la puerta abierta.
-Está bien, Haydée, después la llamo para que culeemos en otro lugar que no sea su casa cuando su marido esté cerca, no nos dimos cuenta del tiempo que estuvimos culeando.
-Está bien, me llama para ponernos de acuerdo.
Me limpio rápidamente las ...
... piernas y mi vagina del semen de Abraham, él se esconde bajo la cama, salgo a la sala y está mi marido viendo televisión, voy a la cocina y le traigo un fresco y un bocadillo, me le siento en las piernas y lo comienzo a acariciar.
-Gerardo, quiero culear, vamos a la cama.
El me mete la mano bajo mi bata y me toca mi monte de venus y me recorre con un dedo mi raja.
-No traes nada debajo como siempre cuando estamos solos en la casa, me excitas Haydée, vamos a la cama.
Me lo llevo al cuarto, él se desnuda y se acuesta boca arriba con su verga bien erecta, yo me quito mi bata y me acuesto sobre el para acomodar su verga en mi vagina y no vea hacia la puerta para que salga Abraham, siento una mano que me acaricia las nalgas, no es la de mi marido, es Abraham, me lleva su mano hasta la entrada de mi vagina y me acaricia el clítoris, lo dejo hacerlo para que mi marido no sospeche, quita su mano y yo me acomodo la verga de mi marido y me la hunde toda, comienzo a subir y bajar en ella cuando siento que me pellizcan una nalga y logro observar donde sale Abraham de mi cuarto, estoy cansada de las cogidas que me he dado en el día, apuro el paso y logro que mi marido me dé su semen rápidamente, él se queda dormido y yo salgo para el baño, estoy duchada cuando suena el teléfono, es Abraham:
-Que rica se ve tu vagina cuando se está devorando una verga, gracias por dejarme observarte, te debo otra buena culeada.
-Yo lo llamo cuando esté sola, yo también quiero darme otra ...