1. Sigo siendo dichoso


    Fecha: 07/05/2020, Categorías: Incesto Autor: Susyalfi, Fuente: SexoSinTabues

    Parece que mi relato ha gustado pues no han sido pocos los pedidos que continuara mi historia sexual. Desayuné y luego pense en bañarme, lo hice pero no pude cumplir con su pedido, me toqué, ya que la pija se habia parado por causa de mis recientes recuerdos, aproveche para hacerme una preciosa paja, pensando en ella. Ya calmado me dedique a acomodar mis cosas, estaba tentado de ver porno pero, hubiese sido para volver a faltar al pedido que me hizo. Por fin escucho su coche entrar al garaje, voy en su encuentro la abrazo y beso en la boca, reaccionó de inmediato, me dice: eres un calenton!!. Baja unas bolsas con sus compras y vamos para la cocina, alli me pide que me calme, y se va a cambiar. Calmarme??,, esta loca, como me voy a calmar la segui al dormitorio, la encuentro con la cabeza tapada pues se estaba sacando un sueter, la tomo desde atras y se sorprende, se da vuelta me dice: no te pedi que te calmases!!!, a modo de reto. Quedo paralizado, y quizas mi cara denotaba desilucion o algo parecido. Se compadeció, me dice bueno termina de desvetirme tu. Lo hago besandola toda y ella lo hace conmigo, desnudos nos abrazamos con un beso de lengua bien profundo, mientras mi pija se acomodó solita en la boca de su concha, parecia seca, me pide que espere, se moja dos dedos en la boca, se toca y dice ahora si, metemela, mi macho!. Apoyada en la pared con una pierna levantada con su pie en el borde de la cama, la cojo desesperadamente. Le pregunto me paro cuando me venga?, no ...
    ... hijo, descargate no bien te vengan ganas. Muy poco duró mi polvo, ya que ella no acabó. La saco, con su bombacha se seca y me seca a pija. Ahora mi calenton, lávate y vamos a almorzar. Me visto y ella se pone solo un baton abotonado al frente. Mientras ella calienta comida preparada en el microondas yo tiendo el mantel, imaginando lo que cubre ese baton celeste, que le marca la raya del culo, imaginen tambien, quien estaba ya hecha un fierro de dura. Me observa y se pone seria, niño. Alvidate de mi porque hasta que terminemos de almorzar no haremos nada. Seria de nuevo, almorzamos y conversamos sobre lo que ambos hemos hecho durante la mañana, en medio de la conversacion, me pregunta: te duele?, no no, le miento. Y los huevos?, solo un poquito. Debes aprender a dominar estas brutas calenturas, sino sufriras mucho. Imagina que yo haya llegado a casa con alguna amiga, que hubieses hecho? No me digas que te la cogias a ella tambien porque me enojo. No mama , como podria. Tienes razon. Te muestro que me enseñó un compañero para no pasar papelones. Saca la poronga y me doi un fuerte pellizco, ella pobre se achica mientras en mis ojos asoman unas lagrimas. Que haces?, estas loco?. Ven, a ver?; que te has hecho, salvaje; con sumo cuidado me la toma desde abajo y la observa, diciendo, bruto!, tienes un cardenal al costado debajo de la cabeza, se esta hinchando, te pondré hielo. Lo hace y para sostenerlo lo venda muy despacito, me la acomoda dentro del boxer y la guarda. Vuelve a calentar ...
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