1. Sigo siendo dichoso


    Fecha: 07/05/2020, Categorías: Incesto Autor: Susyalfi, Fuente: SexoSinTabues

    ... mismo le confesé mi amor eterno. Me miro, fijamente como si me fuera a retar y me dice: Tengo novio, dentro de unos meses me voy a casar. Allí me vino a la mente que yo ya tenia esposa, mi madre. Y la estaba queriendo cornear, un ataque de conciencia me paralizó. Ella se dio cuenta, me preguntó: pensabas que podríamos ser novios?. Si, claro, eres mi sueño. Tonto, tu también eres el mio. Como? Si mientras estemos aquí tu puedes ser mi novio, el sábado la cenicienta volvera a la casa embrujada. Y tu, no tienes novia? Dudé, lo vió y me pregunta, que mentira estas pensando?. Ninguna, la verdad yo estoy igual que tu. Sin seguirla. Lo que pasa que conociéndote a ti lo primero que se me ocurrió es dejarla, le mentí. Tonto 700 km y las familias nos separan, vivamos esta semana y no nos martiricemos por el futuro. Eso y que le deé para adelante era lo mismo. Yo tome dos porrones y luego a bailar y divertirnos. Nos tomamos ella fernet con coca y yo gin con tónica, dos rondas cada uno, eso nada mas. Durante el baile tuvimos oportunidad de abrazarnos besarnos y franelearnos para ponernos a mil. En el jardín, en un rincón ensayamos una suerte de cogida, si éxito, ambos teníamos pantalones elastizados, una mierda, además no había llevado condones y ella tampoco, sin ellos no quería, todo termino en consolarnos con la boca y con las manos, dejándolo para completarlo al otro dia en algún hotel y con los consabidos condones. Asi fue; y mi adorada virgencita era una experta hembra, tampoco ...
    ... yo quede como un novato, pues asi me lo dijo. Era tan ardiente que sus orgamos le llegaban muy seguido, bien húmedos sin ser squirt, poco viscosos y muy agradables en gusto y perfume. Pensé que seria asi por su juventud, ya que mi experiencia era con una sola mujer, que es 21 años mayor que yo. Algo que me dejaba como en falta era que cuando yo terminaba, al salirme, ella asi acostada con sus piernas abiertas seguía con sus manos sacudiendo su lengüeta hasta echarse por lo menos un par mas. La primera vez, me dijo, que vergüenza, lo que hago, no creas que no me has satisfecho ni que eres apresurado, pero es mi costumbre, perdoname. Claro esa maniobra y su caricias aceleraban mi próxima erección, pero lo que me aplacaba era el maldito condon, haciendo que mis orgasmos tardasen mas de 15 minutos, quedaba exhausto. Asi y todo, al finalizar su par de polvitos de paja se los echaba. A mi esta gimnasia, excursiones, luego baile y tragos, sumado a los llamados de mama que quería ver como me hacia la paja y acababa, para asegurarse que no andaría con otras, me estaba matando. Maldito whatsap. Como me controlaban. A medida que pasaban los días mi gran amor por Ana, se iba diluyendo y extrañaba a mi mujercita adorada. Al regresar mi conciencia me pesaba ya no estaba tan alegre y tampoco los demás eran un jolgorio, no se quizás por cansancio o por pena o como yo por haber hecho cornuda a mi amada. Si bien habían pasado dos días de viaje sin desgaste alguno, mama, ejerce sobre mi un ...