Claudia y su hermano
Fecha: 14/05/2020,
Categorías:
Incesto
Autor: Ricardo Diaz, Fuente: CuentoRelatos
... demoraste tanto en decidirte?
-Es que pensé que tú querías hacerlo con Víctor, que es casi de tu edad.
-¿De dónde sacaste eso?
-Es que como él anda siempre tras tuyo, pensé que era porque habría algo entre los dos.
-Hmmm interesante, -pensó ella para sí.
-No nada, si sólo me interesas tú.
Y mientras hablaban, ella movía suavemente su pelvis, en rotación, para darle un movimiento circular a su vulva sobre la verga de su hermano, que empezó a responder lentamente, hasta quedar nuevamente en condiciones de enfrentar otra batalla.
Claudia empezó a moverse frenéticamente debajo de su hermano, acicateada por la idea de que podría tener sexo también con su hermano menor, lo que la puso más caliente aún.
Ahora era Víctor el que la tenía ensartada, que le metía la verga hasta el fondo en su interior, hasta golpear su clítoris. Era a su hermano menor a quien estaba cabalgando, al que le hundía y sacaba la chucha de su verga.
Enloquecida por sus pensamientos lujuriosos, se salió de la posición en que estaban y se puso en cuatro pies, haciendo señas ...
... a Jorge para que se pusiera detrás. El obedeció de inmediato y cual una pareja de perros él la montó, pero ella se adelantó y tomó su verga, la que dirigió a su culo.
El comprendió lo que ella quería y empezó a empujar suavemente, pero la calentura de su hermana era tan grande que se echó hacia atrás y logró que le penetrara hasta la mitad del instrumento de su hermano, el cual empujó y logró penetrar lo que restaba de su verga.
Jorge se echó encima de ella y se apoderó de sus senos, tomando uno en cada mano, mientras empujaba su palo en el interior del culo de Claudia, que movía su cuerpo enloquecida, pensando que era penetrada por su otro hermano.
-Métemelo todo, m’hijito
-Toma, toma, toma
-Uuuuyyyy, que riiiiiiiico
-Comételo todo, m’hijita rica
-¿Te gusta mi culo, m’hijito?
-Es rico, m’hijita. ¿Te gusta mi pico?
-Siiiiiiiii, es riiiiicooo, riiiiicooo, aaaayyyyy
-Toma, toma, tomaaaaa
Fue tanta la fuerza con que acabaron, que Claudia se hundió en la cama y Jorge quedó encima de ella, con la verga hundida en el culo de su hermana.