1. Maduras Anónimas (Cap. 4.5)


    Fecha: 30/05/2020, Categorías: Incesto Autor: Incest_Lover, Fuente: CuentoRelatos

    ... sentimos al frotar juntas nuestras rajas, explotando en un orgasmo desenfrenado. Antes que me diera cuenta ya tenía cuatro dedos bien hundidos en mi raja mientras frotaba mi clítoris con la otra mano. Continúe dándome placer hasta correrme, empapando las sabanas de mi cama con mis jugos.
    
    Respirando entrecortadamente la realidad volvió a mí. Por mucho que deseara volver a sentir una polla penetrándome mi hijo estaba primero. Por ahora seguiría conformándome con mis dedos, tendrían que bastar para calmar mi calentura. Que tonta fui al pensar en eso, el fuego en mi interior se había encendido nuevamente aquella noche y nada podría apagarlo. Nada, excepto una buena, gorda y dura verga.
    
    Un par de semanas después me encontraba de regreso a mi casa luego del trabajo. Era una noche tranquila y silenciosa. Decidí cortar camino por la parte trasera del edificio cuando al acercarme al cobertizo vi que alguien salía a toda prisa de este. Pensando se trataría de un ladrón lo seguí lo más cerca que pude tratando de no ser vista. Lo vi dirigirse hasta los departamentos y subir a los pisos superiores. Ya en la luz pude darme cuenta que se trataba de un adolescente, el cual llevaba una máscara sobre su rostro. El joven iba casi corriendo, como si estuviera desesperado por llegar a su destino. Lo seguí hasta el tercer piso, donde llego hasta la puerta de un departamento y en lugar de tocar el timbre dio unos golpes sobre ella. Me sorprendió ver que una de las vecinas le abría y que ...
    ... esta también llevaba una máscara, pero no solo eso sino que vestía un escandaloso y sensual babydoll. La señora dejo pasar al joven y cerró la puerta.
    
    Dude durante un par de minutos pero motivada por la curiosidad me acerque con cautela y pegue la oreja en la puerta. Claramente pude escuchar el inconfundible sonido de gemidos de placer. ¡Estaban follando!
    
    ¿Acaso era esto a lo que Vicky se refería con Maduras Anónimas? ¿Una especie de servicio de jóvenes gigolós?
    
    Voltee para ver el número de la puerta, 306. Era doña Claudia, una amable señora que muchas veces le había pedido le llevara de comida a mi hijo mientras yo estaba trabajando.
    
    Seguí escuchando dentro del departamento y los gemidos pronto dieron paso a palabras sucias y pervertidas que hacía mucho no escuchaba. Lo que me sorprendió aún mas era que dichas palabras provenían de la señora misma.
    
    Me aleje de ahí aprisa, incapaz de creer que algo así fuera posible. Me dirigí a mi casa corriendo y entre como alma que lleva el diablo, estaba en un estado de shock que incluso olvide de ver como se encontraba mi hijo.
    
    Esa noche termine masturbándome una vez más, manchando mi cama con mi orgasmo.
    
    El shock me duro varios días, en los que no me atreví a ver a doña Claudia a la cara ni a las demás vecinas. ¿Cuántas de ellas formaban parte de esto? ¿Cómo eran capaces de hacerlo? ¿No sentían algún tipo de remordimiento al follar con jóvenes? Varias de ellas incluso tenían hijos de igual o mayor edad. Tome un par de ...
«1234...14»