Por amor a la familia (día cinco - parte cuatro): El castigo
Fecha: 16/06/2020,
Categorías:
Incesto
Autor: lesliefer, Fuente: CuentoRelatos
El trayecto a la casa fue lento e incómodo, mi tío acariciándome, pero yo no sentía ganas de sus caricias, el tráfico, el sol, por más que acomodaba la falda mis piernas se pegaban al vinil del asiento, el maquillaje al cual no estaba acostumbrada me hacía sentir rara, la gente en la calle viéndome con el rímel corrido a causa de unas lágrimas. Finalmente llegamos, abrió automáticamente la cochera, entramos y poco a poco se fue obscureciendo la escena, el cambio de iluminación mientras los ojos se acostumbraban hacia que el lugar quedara absolutamente en tinieblas, en esa obscuridad sentí las manos de mi tío tomándome por la parte trasera del cuello, y con un poquito de fuerza empujándome hacia mi puerta, al mismo tiempo pude sentir su aliento en mi boca, finalmente podía sentir su bigote rasurado rosándome el rededor de mis labios mientras sentía la suavidad y humedad de su lengua hurgando dentro de mi. Se abalanzó sobre mi y con su otra mano me tomo de la cintura, y fue fundiéndose conmigo cada vez mas, yo hipnotizada seguía sus movimientos, me dejaba, estaba como mareada. Nos fundimos en un extraño beso, era la primera vez que un hombre me besaba, aunque pensándolo bien, era la primera vez que alguien me besaba, había besado chicas, pero no de esta forma, no con esta pasión, aunque pensando bien, no estaba yo besando, era a mi a quien besaban, esta vez un hombre tenía el control sobre mí, yo sumisamente me entregaba a sus labios.
Los cuerpos se fueron acomodando, el ...
... asiento era corrido y el estaba casi sobre mí, mis piernas estaban estiradas bajo el volante y todo el peso de mi tío recaía en mi, mis labios tenían vida propia, respondían a los movimientos de los suyos, de vez en cuando escuchaba el sonido de vacío que generaban estos al dejar un hueco entre las comisuras, mi miembro se endurecía, pero permanecía siempre prisionero por sus ataduras. Entonces los labios se separaron. El se levantó de mi y descendió del carro, yo seguía semi recostada en la puerta, el dio la vuelta al vehículo, obviamente no lo veía, ya que después del beso mis ojos seguían cerrados, los abrí pero aún no lograba acoplarme a la obscuridad. Levanto la manija de mi puerta, cuando sentí eso, me incorpore para no caer. El abrió la puerta con cuidado, cuidando que no estuviera ya recargada, me acomode correctamente en el asiento al tiempo que él se agachaba, me tomo de las piernas, las giro con brusquedad quedando estas en el suelo de la chochera, me tomo de ambos brazos y me jalo hacia afuera, por la inercia quede pegada a su cuerpo, me tomo y me empujo contra la puerta trasera del auto y se pegó totalmente a mi, atrapándome contra el auto. La puerta delantera se cerró sola haciendo un ruido fuerte por el eco del lugar donde estábamos. Se abalanzo sobre mis labios besándome nuevamente, pero sus manos ahora no se detenían, con una me tomaba del cuello mientras con la otra me acariciaba la cadera y parte de mi trasero, yo podía sentir su pene duro rosándose contra mi ...