Sábado, aburrido y solo
Fecha: 03/10/2017,
Categorías:
Fantasías Eróticas
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
A medida que pasa el tiempo, empiezo a recordar algunas aventuras que tuve a lo largo de mi vida. Hoy les voy a contar una que paso hace muchos años, aún no había llegado el whats app a la argentina.
Era sabado, medio lluvioso, yo había trabajado todo el dia, y al llegar a casa me tire a dormir una pequeña siesta. Desperté casi a medianoche, muy tarde para arreglar algo.
Decidi cocinar algo, y quedarme en casa. Me disponía a tener una noche tranquila, con película, alguna paja, y a la cama.
La tentación fue mas fuerte, y mientras preparaba la cena, empece a enviar mensajes de texto a varios de mis contactos, para ver si alguno picaba.
Casi una hora despues, y con la mayoría sin respuesta (salvo alguno que me decía que ya tenía plan) apareció una de Joan, “estoy en un evento, termino en una hora”. Ok, respondi.
Se ponia interesante el sabado.
Al salir me llamo, le conté que no tenía ganas de salir, y se vino para mi casa.
Llego cerca de las 2 AM, baje a abrirle, y en el ascensor ya empezamos con el manoseo.
Entramos a casa, hechos dos fuegos, y casi desvistiéndonos, nos tiramos en la cama. Comenzando un furiosos 69. Él se puso sobre mí, asi que veía su hermosa verga negra, con los huevos colgando, y un hermoso agujero rosado, que culminaba esa obra de arte.
Chupaba su pija, y sus bolas, mientras Joan metía dos dedos dentro de mi culo, y me mamaba al mismo tiempo.
No teníamos intencion de acabar, asi que, por momentos, alguno de los dos se ...
... detenía, para solo disfrutar lo que el otro hacía.
Perdimos noción del tiempo, habría pasado media hora, 40 minutos?, no sé. La cuestión que entro un mensaje a mi celular. Me deshice del 69, para poder leer la pantalla, y era Nina, una de las chicas que había conocido en Amerika, cuando empece a ir con Gisselle. Estaba saliendo del boliche, porque estaba aburrida, y queria saber por dónde estaba yo.
Le pase mi direccion, y me respondio “en 40 minutos llego”.
Nos levantamos con Joan, ambos en pelotas, y fuimos a la cocina a tomar algo, y refrescarnos. Nuestras vergas estaban mojadas en saliva, nuestros culos tambien, y ninguno de los dos había acabado aún.
Nina llego, toco timbre, me puse un short y una remera y bajé a abrirle. Mi sorpresa fue mayúscula, ya que no vino sola. Estaba con otra chica tambien.
Nina era una mujer hecha y derecha, pero se notaba que su amiga Marcela era una trans.
Subimos, mientras tanto Joan se puso una vieja remera mía y un short que le preste.
Estaban muy aburridas, y mi mensaje les salvo la noche. Por eso decidieron venirse.
Destapamos una botella de vino, y charlamos como si fuéramos amigos de toda la vida. Luego otra botella más, y luego otra, y perdi la cuenta.
La conversación se daba entre temas varios, hasta que llegamos a que cada uno contara de que trabajaba. Joan dijo que era stripper, y las chicas se rieron. Entonces, medio enojado, se paró y comenzó a desvestirse sin musica de fondo.
Hacia los movimientos de un ...