Elena (A.C.) - mi masoquista IV - Final
Fecha: 21/06/2020,
Categorías:
Hetero
Autor: Cold_P, Fuente: CuentoRelatos
... su casa, ensayando algunas nuevas canciones.
—Y si mi memoria no me falla, terminas en 15 minutos, ¿no? - afirmó
—Voy para allá en cuanto termine aquí.
—Te dejo la puerta abierta. Ya te la sabes. – me dijo con cierta alegría
—Ok
Cabe señalar que me sentía fatal. Siendo honestos, pese a que mí, en ese entonces cuñada, estuviera de 10 y completamente caliente y dispuesta a tener sexo sin ningún compromiso, yo no me sentía con ganas de nada. Si, llegado el momento, mi entrepierna ganaría la batalla, pero no tenía ánimos de hacer nada con nadie. Quería ver a Elena, confrontarla… pero mi curiosidad era más. Quería saber con quién me había engañado y de ser posible, poder confrontarlos a ambos y, por qué no, golpear al imbécil que me “pedaleaba la bicicleta” (dicho muy común en mi país).
Así que me dirigí hacia la casa de Elena hecho un mar de confusión y a sabiendas de que tendría que intercambiar sexo por información, es decir, convertirme en una prostituta… o bueno, así me sentía.
Nada más entrar escuché un grito desde la habitación de Elena que me dijo “estoy aquí arriba cuñadito”. Cuando subí y entré al cuarto, me recibió una Jannine en ropa interior, despeinada y recostada de manera increíblemente voluptuosa viendo la tele sobre la cama de mi novia. Tengo que reconocer que me excité bastante ante dicha visión.
—Cuñadito, ¿por qué la cara larga? – me preguntó con sorna
—¿Qué quieres hacer? – pregunté resignado y sabiendo lo que iba a suceder
—¿Tú ...
... qué quieres hacer? – me preguntó expectante
—Lo que yo quiero es saber qué demonios está pasando – le espeté enojado y visiblemente triste.
Ella me miró y sentí cómo es que me evaluaba y también a la situación. Tras un pequeño rato de pensarlo, suavizó su semblante y me preguntó:
—Te duele mucho, ¿verdad?
—No sé qué pensar… no que sentir…
—Te voy a decir varias cosas cuñado y no quiero que me lo tomes a mal – me dijo con cierto denuedo – pero lo que te voy a decir es en buena onda, en mala onda y en plan de chantaje, ¿ok?
—Ok
—Primero, se me ha hecho muy ojete que Elena te haya puesto el cuerno tanto tiempo. Se ve que la quieres y a lo largo de todo este tiempo, me ha dado gusto ver que ella es feliz y es muy feliz contigo… pero tú no eres una perita en dulce, porque no sólo le pusiste el cuerno, se lo pusiste conmigo y eso, está muy cabrón. Así que, si no haces lo que yo te diga, le voy a contar esta pequeña conversación que estoy grabando con mi cel, ¿entendido?
—Hija de tu… - comencé a decir, pero me atajó
—Peeeeeroooo… la neta, te veo bastante tristón y en buen pedo, te voy a contar que rollo. Pero después de eso, o me haces gozar como toda una puta o le marco. No quiero que me interrumpas ni nada. Yo decido hasta donde termino de hablar. No quiero reacciones ni interrupciones. ¿Ok? – vaya que ésta mujer los tenía bien puestos.
—¿Acaso tengo de otra? – me resigné
—Mira, Elena te lleva poniendo el cuerno desde que llevaban 4 meses. Sí, ya ...