49.4 Amantes confiados
Fecha: 24/06/2020,
Categorías:
Transexuales
Autor: Albany, Fuente: CuentoRelatos
... apretándolas contra su abdomen, cuando las calentó un poco se volvió.
-¡Joder! -exclamó mirándome de arriba abajo. Estaba totalmente desnudo ante él y después de su exclamación intentó sujetarme, comencé a reír y me escapé corriendo hacia la cama, salté sobre ella y allí me pilló tirándose en plancha a por mí, quería besarme y yo peleaba para que no lo hiciera escurriéndome entre sus brazos como una anguila en el agua.
Peleamos un rato, el tratando de sujetarme para besar mi cara y yo haciendo todo lo posible para que no sucediera, dando patadas al aire hasta que sujetó mis muñecas por encima de mi cabeza y aproximo su cara a la mía.
-¡Cabrón de niño!, como pelea. –acerco su boca abierta, como si fuera a comerme, no podía moverme mucho, estaba sobre mí, entre mis piernas, solamente ladeaba mi cabeza de un costado a otro evitando que nuestros labios se encontraran y me rendí al final.
Sus ojos brillaban con sus destellos más dorados revueltos en el chocolate de su mirada, bajaba en movimientos rápidos, pero sin llegar a tocarme hasta que vio que no me movía, que permanecía quieto respirando acelerado, con la boca abierta, divertido por el juego y anhelando su boca y su cálido aliento.
Jugamos un rato con nuestras bocas, comiéndonos nuestras lenguas, abrazando su espalda con mis brazos y su cintura con mis piernas, besos y más besos, tiernos, locos, húmedos, secos. Comenzaba a gustarme su barba y mordía su partida barbilla lamiéndola.
-Quítate la ropa. – le ...
... pedí trémulo de deseo y como pudo, su camisa pantalón y slip dejaron de impedir el contacto pleno de nuestros cuerpos.
Comencé a besarle la polla, a sacar su glande de su prepucio con mis labios, a metérmela entera en la garganta y al poco tiempo.
-Quiero metértela ya en el culo.
Me colocó de rodillas en la cama y ensalivó sus dedos para metérmelos en mi ano y dilatarlo, le pedí que la fuera metiendo despacio, deseaba disfrutar cada milímetro que entrara, notar como su inmensa verga me invadía y estiraba mi ano.
Empujó y entro la punta, suspiré satisfecho y así la fue metiendo, entrando y parando, arrancando de mi ser lamentos de gozo, al final eché mi culito hacia atrás para ser yo el que enterrara su pene en mí.
Comenzó a follarme lentamente y notaba como mi culo se comía toda su polla, moví mis caderas en círculos, no me importaba ser una puta para él en esos momentos y cuando descansaba era yo el me autofollaba tirando para atrás y adelante mi cuerpo metiendo toda su verga en mi vientre.
Cerraba y abría mi culo abrazando fuertemente su tallo, sin dejar que saliera su glande.
-Eres prodigioso, tu culo parece una boca. –me enardecían sus palabras y movía mis caderas con más fuerza, deseaba forzarle para extraerle toda su leche y que me regara por dentro.
-Estas muy bueno mi amor, menea el culo más rápido.
-Sí, así me gusta, putito, cómetelo todo con tu culo.
No dejaba de hablar y me animaba cada vez que impulsaba mi cuerpo para meter su verga ...