Desafío de galaxias (capitulo 82)
Fecha: 20/07/2020,
Categorías:
Incesto
Autor: calvito, Fuente: CuentoRelatos
... —exclamó Anahis— en cuanto se juntan dos…
—Por cierto, para que no te pille por sorpresa, —dijo Hirell—: se ha liado una buena polémica entre los parlamentarios por tu… condecoración.
—¿Qué condecoración? Ya las tengo todas.
—Unos quieren darte otra Medalla de Honor de la República, y otros quieren inventar otra nueva: algo así como la Orden del Merito.
—¡Joder! Que pasa, ¿se aburrían en Beta Pictoris?
—Esos cabrones quieren salir en la foto, —dijo el sargento distraídamente—. ¡Uy! lo siento, se me ha escapado…, pero la foto solo es de mi niña.
—Anda, vamos a llenar la petaca, antes de que se te escape algo más, —dijo levantándose con su ayuda— que luego viene el presidente y te la deja temblando. Pero primero, vamos otra vez a la clínica a que me pongan otro chute.
—No hace falta, tengo yo el analgésico, —dijo el sargento tocándose el bolsillo. Después, mirando su reloj, añadió—: hasta dentro de tres cuartos de hora no te puedo poner más.
—¡Y no te pongas a darle al veneno que destila este! —exclamó Anahis señalando al sargento.
—Mi señora, yo no destilo veneno, —añadió el sargento con aire ofendido.
A media tarde, Sarita llegó con los uniformes limpios y la ayudo a vestirse mientras el sargento se iba para ponerse el uniforme de gala.
—Me ha dicho Anahis que esta noche llegan nuestros padres: ¿crees que es apropiado? El palacio todavía no está habilitado para recibir huéspedes, y además, llega medio parlamento.
—No te preocupes que ya ...
... está todo preparado: los padres tienen alojamiento en el Fénix y a los parlamentarios que les den por el culo. Además, mis padres traen a la niña.
—¡Qué bien! Que ganas tengo de achucharla.
—Por cierto, al final hemos decidido bautizarla; ya sabes que los padres de Felipe son muy cristianos y los míos no lo ven mal, y para evitar líos…
—Es normal, hacéis bien y como dices: evitáis líos con la familia.
—Queremos que seas la madrina.
—¿Sí?, ¡joder tía! pues claro, pero vuestros padres…
—Ya está hablado, pero tienes que llevar… mantilla.
—¡No jodas!
—Y blanca, que estás soltera.
—¡Venga ya¿ Técnicamente no lo estoy.
—Anahis no cuenta, y te recuerdo que no conoces varón: eres… pura.
—¡Joder! No voy a ir con una peineta blanca como si fuera una puta virgen: ¡no me la voy a poner!
—¡Ya lo creo que sí! Aunque te la tenga que clavar a la cabeza con un martillo.
—¡Joder tía! hoy estáis por darme el día.
—Piensa en Anahis, el blanco la sienta muy bien. Seguro que no pone reparos.
—Ya esta: me caso con ella, y ya puedo usar la mantilla negra.
—Sigues siendo pura.
—¡Joder!
—¿Pero como tienes tanto morro?, ¿te vas a casar con Anahis para no ponerte la jodida mantilla blanca?
—Sabes que tenemos pensado casarnos, solo lo adelantaremos.
—¡Anda!, no digas sandeces, —dijo Sarita mientras llamaban a la puerta y abría. El sargento entró impecablemente vestido y dio dos besos a Sarita—. Estás hasta guapo, —bromeó mientras le sacudía unas ...