1. Dos meses con mi suegra


    Fecha: 02/08/2020, Categorías: Incesto Autor: ElGuardian, Fuente: CuentoRelatos

    Nota:
    
    Hola a todos, este es mi primer relato. Nací en España, pero llevo toda una vida en Francia.
    
    Por lo que, para mi escribir en español aunque me encanta, me resulta bastante complejo y por eso quiero de disculparme de ante mano por calidad de este primer ensayo.
    
    Por favor, mándenme sus críticas, consejos o sugerencias a mi correo. Para que mi próximo relato sea de vuestro agrado.
    
    Gracias por leerme y hasta pronto.
    
    elGuardian
    
    ******************************
    
    Capítulo 1: El Inicio
    
    Mi nombre es José, tengo 35 años, estoy casado con María un mujer encantadora de 28. Juntos tenemos la suerte de tener
    
    2 hijos Raúl de 9 y Roció de 6. Vivimos en las afueras de Madrid. Yo en el paro desde hace más de un año, tuve la suerte de contractar un empleo.
    
    Una alegría para nuestra casa. Único inconveniente tendría un periodo de formación de 2 meses en Valencia. Dos meses pasando la semana con los che y los fines de semana en la capital. Dos meses que cambiarían mi vida para siempre.
    
    Por suerte, mi suegra Carmen vive en Valencia, una mujer encantadora de 47 años. Es viuda desde los 42, cuando mi suegro encontró la muerte en la carretera. Vive sola en una grande casa por lo que no le costó nada a María pedirle que aceptara mi presencia durante ese periodo.
    
    Carmen tiene 3 hijas, María es la más mayor, Roció tiene 26 y Lucia 22. Las dos hermanas de mi mujer están en sus vidas, con sus respectivas parejas y viven Lucia en Barcelona y Roció en Madrid.
    
    Desde ...
    ... la desaparición de su marido, Carmen tiene una depresión crónica y mi presencia le puede muy ser benéfica. Desde el primer día nos organizamos muy bien. Mi relación con mi suegra siempre fue muy cordial con la distancia por el respeto. Por el día yo tenía mis ocupaciones laborales y solo cenaba y dormía en casa de mi suegra. Por lo tanto, su vida no se veía muy transformada por mi presencia. Seguía con sus ocupaciones de mujer afortunada, la muerte de su marido la dejo con un buenísimo retiro y una renta del seguro descomunal, ya que era director comercial de un gran banco.
    
    No necesitaba trabajar, la casa pagada y sus hijas en sus vidas. Por lo que se dedicaba a ayudar en todo lo que podía en la iglesia de su parroquia.
    
    Las noches solían ser los momentos en que su depresión mas se manifiesta por la soledad que sentía. Para olvidar su malestar, empezó a dejarse llevar por el alcohol. María estaba, bastante, preocupada y me pidió que intentara ayudarle, como pudiera y se lo prometí.
    
    La primer noche la invite a cenar fuera, nos buscamos un restaurante en las afueras de Valencia. Estaba encantada, a la hora de pedir la bebida, pidió un agua sin gas, yo un botellín de vino (yo no tengo el mismo problema). Nos reímos mucho por la gracia que nos hacia el camarero y realmente fue un buen momento para los dos.
    
    El regreso a casa también fue lleno de carcajadas recordando al camarero. Una vez en la casa, me dijo que estaba cansada y que se iba dormir.
    
    Yo le pregunte:
    
    - ...
«1234...8»