1. En la sala X del sex shop


    Fecha: 29/08/2020, Categorías: Confesiones Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... unas ganas enormes de colar mi mano por debajo de la falda, acariciarme y disfrutar de ese momento… pero me sentía observada y sabía que cualquier movimiento que hiciera no pasaría desapercibido, así que decidí estarme quietecita, pensé en quedarme unos minutos más y luego dirigirme al glory hole que ya conocía y donde me sentía más segura.
    
    Justo en ese momento, observé como un hombre que estaba sentado en la fila de atrás se había levantado para sentarse a mi lado. Yo me puse a temblar nerviosa y pensé en levantarme y marchar.
    
    Pero no me moví, me quedé quieta como una estatua incapaz de levantarme ni de moverme, creo que incluso dejé de respirar jajaja…
    
    Intenté simular prestando atención a la película que en esos momentos los dos hombres se follaban por turnos a la mujer que a pesar del alcohol parecía disfrutar de lo lindo…
    
    De reojo y de forma furtiva miraba al hombre que se había sentado a mi lado, parecía tener unos 50 años o quizás más, no parecía muy alto pues su cabeza me pareció que estaba por debajo de la altura de la mía y también me pareció que no estaba muy en forma pues su tripita era considerable…
    
    De nuevo pensé en levantarme para no alimentar ninguna expectativa…. Pero justo cuando ya había decidido marchar el hombre se bajó la cremallera del pantalón para sacarse una polla enorme que empezó a masajear mientras miraba la pantalla y como si yo no existiera…
    
    Yo no daba crédito a lo que estaba sucediendo y me resistía a mirar con más atención. ...
    ... Pero esa imagen me mantuvo quieta en mi butaca sin poder evitar seguir mirando de reojo como ese hombre se estaba masturbando lentamente a mi lado.
    
    Su polla me parecía enorme, la sostenía con una mano y estaba totalmente empinada mirando al techo…el hombre se acomodó un poco en su asiento para desabrocharse totalmente el pantalón… su polla se balanceaba ahora al dejar de estar sujeta por su mano, como si me estuviera invitando a cogerla.
    
    Yo sentía mis mejillas acaloradas y un deseo irrefrenable de coger esa polla para hacerla mía….bajo mi falda sentía la necesidad de calmar mi ardientes deseos…
    
    Sentía la tentación demasiado cerca y reconozco que mi debilidad me llevo a hacer algo que no hubiera imaginado.
    
    Mis ojos ya dejaron de mirar la pantalla para pasar a mirar descaradamente esa polla que seguí balanceándose de forma obscena y mi mano se acercó algo insegura para tocarla.
    
    Al sentir el roce de mis dedos con su polla me sentí ya irremediablemente perdida y tan solo pude que cogerla con la mano para masajearla como le había visto hacérselo a él mismo…
    
    Confieso que me encontraba excitada y caliente como una gata en celo, tenía ganas de polla y tenía una enorme entre mis manos que estaba deseando que la hicieran disfrutar…. ¿Cómo iba a poder resistirme?
    
    El hombre gimió complacido en una clara señal de que lo estaba esperando con verdadero deseo y yo más tranquila seguí masturbando esa polla… mientras en la pantalla los gemidos se repetían al tiempo las ...