Historias de oficina -20-
Fecha: 02/09/2020,
Categorías:
Erotismo y Amor
Autor: Danuss, Fuente: CuentoRelatos
... abandonada en cuanto a mí que me removía rasguñando, pateando o mordiendo, el mismo hombre que ataco a mi amiga levanto su puño contra mí y al bajarlo todo poco a poco comenzó a desvanecerse.
Poco a poco comencé a despertar, mi cabeza me dolía muchísimo lo mismo que todo mi cuerpo. A medida que mi cuerpo se acostumbraba a la tenue luz pude ver que estaba en una habitación muy sucia, escuche ruidos a mi alrededor – ¿Quién anda ahí? – pregunto mi mente, aunque dudo que haya salido de mis labios, me levante como pude, poco a poco el mundo se detuvo, mi vista pudo centrarse. Alguien se sentó a mi lado.
—Hola – dijo la extraña chica —¿Estas bien?
—¿Dónde estoy? – Pregunte confundida y muy adolorida.
—Bienvenida a Uruguay, el mareo que posiblemente sientas es por las drogas que te inyectaron.
—¿Me drogaron? No entiendo nada ¿Por qué estoy aca?
—No lo sabemos las otras chicas y yo tenemos prohibido hablarte, me mandaron a ver si habías despertado ya. Nada mas
—¿Que es este lugar? No entiendo nada ¿Eres también una rehén?
—Esto es una sucursal al infierno. Llevo años acá, bueno acá, acá no. Te van cambiando de lugar, siempre pueden llamarnos. Políticos, empresarios, nobleza, gente con mucho dinero ¿Qué más da? Las mujeres siempre somos un buen negocio.
—¡Que espantoso! – escapo de mis labios comprendiendo lo que me decía – tenemos que salir de acá.
—No hay salida de acá – agrego pesimista.
En otra ocasión abría invertido mi tiempo en convencerla de ...
... que me acompañase, pero viendo el escenario frente a mí me di cuenta de que sería inútil y que lo mejor sería escapar sola y volver con ayuda. Camine por la habitación tratando de no hacer ruido, pero estaba claro que el sigilo no era una de mis habilidades más destacadas. Apenas había salido de la habitación donde estaba recluida cuando un guardia pudo darse cuenta de que estaba despierta se acercó a mi tratando de poner sus manos sobre mí, fue en ese momento que las clases de Michael venían una vez más a mi mente.
**
El Sector-Dos rebosaba de leales hombres a mi sádico amigo, me habían permitido quedarme, por lo que en esa semana me esforcé al máximo en cumplir con sus exigencias en cuanto a entrenamiento.
—Mariza, mariza… ¿Puedes prestar atención? Esto podría salvar tu vida algún día. No quiero tener que repetirlo – me llamo la atención Michael.
—Lo siento Michael – respondí inmediatamente.
—No lo sientas, solo presta atención. Bien en algunos casos un enemigo podría optar por un ataque frontal – Levanto la mano y con una seña llamo a uno de sus soldados – Ok, quiero que ataque a Mariza, trata de sujetar su cuello – le ordeno
—No estoy muy segura de esto – admití.
—Tranquila, no pasa nada. Bien, una opción Srta. Márquez seria usar la palma así – explico levanto su mano su mano en un arco vertical – y golpear con fuerza el tabique del atacante. Lo que podría causar que este se rompa dándote la oportunidad de irte. ¿Listos? Ahora.
Observe como él venía ...