Historias de oficina -20-
Fecha: 02/09/2020,
Categorías:
Erotismo y Amor
Autor: Danuss, Fuente: CuentoRelatos
... copiar un platillo que mama hacia siempre que mi padre se enojaba, era como un pasaje hacia la reconciliación de ambos, tal vez con Víctor sucediera la mismo.
Con la cena ya resuelta me dispuse a comprar algunas otras cosas que darían un detalle más íntimo al asunto, la discusión seguía tan firme en mi mente. Rogaba que todo hubiera sido presión del momento y que Víctor estuviera realmente arrepentido de haberme lastimado. Mis guardaespaldas estaban intranquilos por haber detectado un vehículo que nos seguía, realmente yo también me sentí muy intranquila al saberlo, pero que no nos atacaban me hacía pensar en dos posibilidades. Podría ser gente de Michael, siguiéndome como siempre había hecho o podría ser gente de mis nuevos amigos de INTERPOL.
De una u otra forma volvimos a la mansión. Comencé con todos los preparativos, parecía como si el tiempo volara a una velocidad exagerada. Me coloqué mis auriculares y empecé a bailar al ritmo de la música, el delicioso aroma comenzaba a llenar la cocina, necesitaba preparar la salsa. Pato a la naranja con salsa agridulce y papas a la francesa, delicioso.
Me había alejado tanto del mundo que no percibí el momento en el que entro, al voltearme pude ver que me observaba, mi cuerpo se paralizo al momento, no lo esperaba… todavía no estaba lista la sorpresa. Se acercó a mí, retrocedí… noté como eso lo había lastimado. La discusión logro hacer que nos sinceráramos tanto así que Víctor lloro frente a mí, pobre amor mío. Me ...
... acerque a él besándolo con todo el amor que tenía en mí. Nuestros cuerpos no podían estar peleados, nos necesitábamos. Mordía mis labios, tiraba de ellos como si estuviera desesperado. Nuestras lenguas se encontraron, se exploraban como si fuese la primera vez.
Sus manos acariciaron mi cuerpo, desabrocharon mi blusa un botón a la vez sin que nuestros labios se separasen en ningún momento. Llego a mi cintura, desabrocho mi cinturón tomándose su tiempo y haciendo que me impaciente. El fino pantalón por fin cayo junto con mi ropa interior. Sus manos tomaron posesión de mis nalgas y sin previo aviso me levanto en aire depositándome sobre la barra de la elegante cocina. Un espasmo de frio se causó cuando la parte más delicada de mi piel toco la fría superficie. Me reí solo durante unos pocos segundos antes que nuestros labios volvieran a encontrarse, acaricio mi rostro apartando los clásicos mechones rebeles que como siempre querían caer sobre mis ojos.
Arrodillándose ante mí y sin previo aviso su lengua se perdió en mí ya impacienté sexo. Tome una fuerte bocanada de aire dejando escapar un suspiro tan ansiado. Mis piernas lo aprisionaron mientras su habilidosa lengua trataba con éxito de volverme loca. mis manos tiraban de su cabello mientras lo aprisionaba aún más contra mí.
—Esto no quiere decir que te perdone – dije totalmente agitada – todavía tenes que esforzarte mucho más.
Fue en ese preciso momento que sentí como sus dedos entraban en mí, gemí de forma casi ...