1. Una simple travesía se convirtió en placentera experiencia


    Fecha: 09/10/2020, Categorías: Infidelidad Autor: Angelucian, Fuente: CuentoRelatos

    ... eso, llevé mis manos a su rostro como pidiendo con la mirada ser besada en ese acto. El captó la petición y se inclinó ante mí para besarme. Sonreí y sentí como como aceleraba los movimientos girando circularmente su cadera haciendo que su pene hurgara en todo mi ser como apoderándose de cada centímetro de mi ser, solté un pequeño grito de placer.
    
    Luego de disfrutar esa posición, me giró de perfil estando acostada y está vez penetró fuertemente, no sabía por qué pero había descubierto que me excitaba que me tratara como una perra, cómo SU perra... y quizás eso era, pero lejos de asustarme me encantaba. Seguía tomándome del cuello como si me ahorcara diciéndome "sabía que te gustaría perra, con esa carita de que no haces nada se nota que eres una puta en la cama y que te encanta, ahora respóndele a tu amo como se debe", me tenía a su merced y yo sólo decía "sí señor".
    
    Colocó su frente sobre mi cabeza y aumentó la velocidad en la que entraba y salía su pene de mí ser, estaba extasiada.
    
    .Ahora lúcete en la posición correcta perra. .Dijo él mientras me soltaba.
    
    Obviamente era colocarme de perrito, levantando mi culo y poniéndolo sólo a su disposición para que hiciera conmigo lo que quisiera. Obedecí y acosté mi cara contra el suelo y rozaba la cabeza de su pene en mi vagina, cómo pidiendo que le rogara que me cogiera como le diera la gana y me decía "pídelo" y yo sólo respondía "sí señor, cójame así, cójame duro y hágame suya" y de una sola y ...
    ... cumpliendo las órdenes de una perrita en celo metió su miembro mientras me tomaba de la cintura.
    
    En ese momento sentí algo de dolor pero no me importaba, mientras más dolor sentía más felicidad y placer me causaba. Parecía una loca, masoquista sedienta de dolor porque eso me causaba placer. Haló mi cabello, quedé mirando hacia arriba con mis labios algo rotos por mis propias mordidas, mientras él seguía ejecutándome, haciéndome gritar está vez, ya no podía contenerme.
    
    Me seguía penetrando rápidamente mientras me daba nalgadas que retumbaban por toda la sala, hasta que comencé a venirme en un orgasmo que no podía frenar, sentí como si acabara pero él seguía dándome duro y salvaje muy rápido haciéndome tener varios orgasmos seguidos allí mismo dejándome extasiada y llena de placer, lloré y me reí cuando lo hizo, fue tan fantástico que ambos tuvimos el mejor de los orgasmos, sentí como él acabo dentro de mí dejándome toda la vagina llena de su lechita caliente y desbordándose por mis piernas. Estábamos tan cansados que no podíamos hablar, solo recorrió mis labios con su lengua y me besó sonriendo.
    
    Descansamos un poco y nos arreglamos, salimos sin que nadie nos viera. Mientras seguíamos viendo obras de arte, nos íbamos riendo por lo que había pasado.
    
    —¿Quieres repetirlo alguna vez? .Susurro en mi oído.
    
    Sonreí de medio lado y lo único que dije fue… —Quizás.
    
    A lo cual me dio una pequeña bofetada sin que nadie viera y dijo "se dice, sí señor...". 
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