r) Davy - Alex - Rafael
Fecha: 10/10/2020,
Categorías:
Incesto
Autor: Albany, Fuente: CuentoRelatos
Continuación de: Secretos de familia
El curso había terminado y podía considerarme satisfecho de los resultados. Óliver había conseguido sacar todas las asignaturas y con sobresalientes, este año en Septiembre, comenzaría en la universidad. Había marchado para hacer interrail por Europa con sus compañeros de estudio, conservaba parte del dinero que ganó el verano pasado en la sidrería y lo que le faltaba fue mi regalo por su esfuerzo.
José, como el verano pasado marchó con mi madre y su pareja. Los únicos que quedábamos en casa éramos Rafael y yo con mi padre, mi hermano obligado por dos temas que había suspendido, y yo…, Davy me había invitado para que le acompañara con los niños a Norfolk donde estarían un mes, como la vez pasada me negué, ahora era porque deseaba hacer una asignatura que facilitaba la obtención de créditos que necesitaba en la uni.
Estábamos terminando los últimos preparativos, documentación y el gran número de maletas con el equipaje, teníamos la suerte de que para esta labor estaba la señora Lara. Davy me dejaba una larga lista de labores, como castigo por no acompañarles.
Mi relación con él se había consolidado y surgido algo más que la relación de trabajo que acordamos y el sexo, por mi parte una estupenda amistad, al menos en el trato diario, me comentaba sus decisiones antes de decidirlas y empezaba a ser un colaborador para sacar adelante sus ideas además de su amante cuando lo deseaba.
Su recuperación se daba por concluida, era ...
... definitiva pero no total, como sospechaba la cojera que sufría sería un recuerdo imborrable para recordar siempre la muerte de sus padres. En la cama se reveló creativo y entusiasta, en mi tenía un aventajado alumno deseoso de darle gusto a lo que quisiera o se le pudiera ocurrir, cada vez disfrutaba más del sexo con cualquiera de mis dos hombres, y siempre me encontraban receptivo y dispuesto a satisfacer sus deseos.
Me di cuenta de una faceta curiosa de Davy, en realidad y más concretamente, de su verga, ahora que el sexo se había hecho habitual, su prodigiosa y aventajada polla no cogía la dureza tan rotunda de antes. Al ser tan larga formaba una curva hacia abajo, como si el glande le pesara demasiado, claro está que esto no le sucedía si se abstenía de follarme una semana. De una manera u otra su polla seguía dando las mismas satisfacciones a mí culo y a mí boca.
La llamada de mi hermano Rafa interrumpió mi trabajo de ese día. Al principio no conseguía entender lo que decía. Habían tenido que recoger a papá y llevarlo al hospital en ambulancia por un accidente. Lloraba y sus palabras no resultaban comprensibles. Conseguí que me dijera el nombre del hospital en el que estaban, y no me interesaba otra cosa que llegar allí cuanto antes.
-¿Qué te sucede? Te has quedado blanco. -Davy me tuvo que sostener, las heridas nunca me han gustado, y no me imaginaba estudiar algo relacionado con ello, imaginaba a mi padre en un baño de sangre y sentía mareos.
Le explique lo que ...