1. Elmer y la paradoja sesentista del Anses (Partes 1 y 2)


    Fecha: 15/11/2020, Categorías: Incesto Autor: ElmerVanHess, Fuente: CuentoRelatos

    ... su ano. Lo esparcí por sus nalgas y sobre su orificio y ahí ataque sin pudor y hasta el fondo. Un alarido rompió todos los decibeles hasta ese momento, desgarrador y placentero al mismo tiempo. Claro, pensé, la pija de goma se amoldaba a su orificio, mi pija gruesa y dura entraba con dolor y placer al mismo tiempo arremetiendo con todo. Dude...
    
    - No la saques por nada del mundo guacho... seguí, matame.
    
    Una escena felinesca casi, Bizet de fondo, los gritos de Irma, el perfume todo en medio de un silencio de alrededor que asustaba. Empezó a mover las caderas y a cogerme ella la pija con su culo y el movimiento de sus muslos mientras yo permanecía quieto y arrodillado. Su orto como una boa devoradora absorbía mi pene y lo dejaba salir con dificultad. La presión me enloquecía.
    
    - Voy a acabar Elmer... vos...?
    
    - Yo también Irma donde querés la leche...?
    
    - Toda adentro guacho... toda todita...!!!
    
    La sensación de acabar con la pija muy apretada fue increíble. Ahora mi grito se confundió al unísono con el de ella y caímos juntos sobre el ...
    ... sillón.
    
    La saque muy despacito y algunas gotas todavía caían sobre tus nalgas. El efecto del aceite borraba cualquier atisbo de la menor imperfección.
    
    - Uhh... ya son las 15:30 tengo que volver, me voy a bañar lindo, llevate todos los papeles y me llamas. Anota mi celu...113-2...
    
    - Listo Irma me puedo dar una ducha rápida?
    
    Dale papito mientras preparo todo, llamame así pasas un día a última hora con más tiempo, increíble como se nos pasó la hora...
    
    Me duche rápido y salí, me dio un beso muy suave en los labios aun calientes.
    
    Cuando iba a bajar las escaleras se entreabrió una puerta...
    
    - Hola, te dejo mi teléfono, llamame, soy Irina, necesito hablar con vos por favor.
    
    Intente ver algo de la misteriosa dama, apenas una negra cabellera y una silueta con un camisón negro, alta, piernas larguísimas. Cuando atine a mirar más la puerta se cerró de golpe dejando abierto el misterio. Por esta tarde ya tenía cumplida mi cuota, me fui con la carpeta, casi trastabillando por la maratón sexual a la que me sometió Irma, pero intrigado por Irina... 
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