1. Mi primer trio con mis tias


    Fecha: 23/11/2020, Categorías: Grandes Series, Autor: Cabrera1993, Fuente: CuentoRelatos

    Era sábado y habíamos quedado a cenar en casa de mis padres. Mi madre había invitado a mis tíos y a sus respectivas esposas a que vinieran a cenar con nosotros. Me llamo Andrés, tengo 18 años y soy algo tímido con las mujeres por lo que aún no me había comido una rosca con mis amigas y compañeras de instituto.
    
    Soy alto ya que mido 1.83, cabello corto, moreno y liso y delgado, pero como les digo debido a mi timidez todavía no había saboreado las mieles y encantos del sexo femenino.
    
    Mis tíos llegaron a casa sobre las 9 de la noche ya que a mi madre le gusta que los invitados sean puntuales a la hora de cenar. Mis tíos tienen 45 y 42 años y mis tías 41 y 38 años respectivamente. Ambas tienen cuerpos de escándalo al menos para mí que me había masturbado en más de una ocasión pensando en ellas.
    
    Mi tía Julia tiene 41 años y es morena de cabello largo y liso que le llega hasta la cintura. Siempre me ha encantado esa cabellera tan larga y perfectamente cuidada que posee. Sus ojos son verdosos, los labios finos y deseosos de comer lo que se encontrase delante tal y como veréis
    
    De altura mide 1.50 y en cuanto al pecho este es bastante voluminoso ya que gasta una talla 110. Por otra parte, posee un culo respingón el cual me vuelve loco sólo de verlo e imaginar lo que podría hacer con él si algún día fuese mío. Iba vestida con un traje pantalón blanco, blusa negra y llevaba botines marrones de piel y de tacón alto de aguja.
    
    Por su parte, mi tía Beatriz (Bea para todos) ...
    ... tiene 38 años y está tremendamente potente. Tiene el pelo corto, rizado y rubio. Ojos azules, labios gruesos, un poco más baja que Julia pues mide 1.45 y con pecho más pequeño que rondará sobre la talla 90.
    
    Normalmente sus pechos se le marcan bastante bajo su ropa pues por lo que sé no suele llevar sujetador ya que debido a su dureza se le mantienen perfectamente sin necesidad de sostén, además de haberle oído decir alguna vez a Julia y a mi madre que se sentía más cómoda sin llevar sujetador. A Bea solía gustarle remarcar su cuerpo con trajes ceñidos que la hacían aún más deseable para los hombres. Aquella noche en concreto había elegido para la ocasión un provocativo vestido de tirantes de color azul marino con escote en pico y la espalda desnuda hasta la cintura. ¡Umm, estaba para comérsela!
    
    Por supuesto iba sin sujetador con lo que se le marcaban un tanto los pezones por debajo de la tela. El conjunto se cerraba con unos zapatos negros de piel y de tacón de aguja no tan alto como el de Julia.
    
    Debo confesarles que siempre he sido algo fetichista en el tema del calzado femenino. Me encanta el calzado de tacón alto ya que estiliza el cuerpo de la mujer y de ese modo me excita más la visión de ellas.
    
    Nos pusimos a cenar tras estar conversando un rato y a mí me tocó en una de las esquinas de la mesa. Por suerte delante de mí se colocó Julia y a mi lado Bea. Pensé que debería estar hablando con alguno de los aburridos de mis tíos, pero la fortuna me favoreció y mis ...
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