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Mi primer trio con mis tias
Fecha: 23/11/2020, Categorías: Grandes Series, Autor: Cabrera1993, Fuente: CuentoRelatos
... compañeras de cena serían ellas dos. Tanto mi tía Bea como Julia siempre hacen broma conmigo preguntándome si tengo algún lío en el instituto o en el barrio lo cual siempre me pone nervioso y acabo diciéndoles que sigo igual que siempre, es decir solo. Mi tía Bea al sentarse a comer siempre tenía la costumbre de colocar la servilleta sobre sus piernas. Ello hacía que se le subiera algo la falda lo cual permitía tener una mejor visión de sus bonitas piernas. Sé que yo no le era indiferente a mi tía Bea pues una vez estando en el lavabo orinando entró ella de repente y me vio con la polla al aire y guiñándome un ojo y sonriendo me dijo que tuviera cuidado porque sería una pena la tenía rebuena. En cuanto a Julia en una ocasión la pillé haciendo el amor con mi padre. Fue una noche de las vacaciones pasadas cuando me levanté de madrugada y me asomé a la terraza del apartamento de mis tíos donde nos reunimos las tres familias a pasar unos días de descanso. Pues bien, como les digo salí a la terraza a fumar un cigarro cuando oí ruidos y risas en la piscina. Me escondí un poco en la terraza para no ser visto pero poder ver sin problemas. Cuál no sería mi sorpresa cuando vi a mi tía comiéndole la polla a mi padre tumbados ambos en el césped. Mi padre gemía como un condenado agarrándole la melena a Julia sin dejarla escapar y pidiéndole más y más. Finalmente, mi padre se corrió de manera brutal en la cara de mi tía enviándole unas buenas sacudidas de esperma que fueron ...
... a parar a su cara y al interior de su boca y que Julia lamió con una cara de auténtica lujuria. ¡Joder menuda mamada le había hecho mi tía a mi padre! Yo rápidamente me fui al baño a correrme como un descosido recordando la escena que acababa de observar. Volviendo a la cena como les comentaba anteriormente mis tías de vez en cuando seguían haciendo broma y trataban de tirarme de la lengua para saber si tenía alguna aventura por ahí. Al decirles que no y que aún seguía virgen mi tía Bea le comentó a Julia que eso había que arreglarlo con urgencia pues no quería que su sobrino continuase de aquella manera teniendo 18 años. Julia asintió ante el comentario de Bea y de repente noté sobre mi entrepierna el botín de mi tía que se apoyaba apretando mi polla. Yo llevaba unos pantalones chinos con lo cual noté la presión de la suela de su botín sobre mi polla, la cual empezó a despertar. Yo me atraganté ante semejante ataque, pero por suerte nadie se dio cuenta de la situación. Bueno nadie no es cierto, pues mi tía Bea bajó la mirada hacia abajo y vio como Julia apoyaba su pie sobre mí. Bea y Julia se miraron y sonrieron ambas mientras Bea se pasaba su lengua sobre sus labios viendo como mi pene crecía poco a poco con el roce del pie de Julia. De repente Bea bajó su mano hacia mi entrepierna acariciando mi bulto que cada vez se hinchaba más y más. Aquello ocurrió cuando ya estábamos acabando de comer con lo cual aproveché para levantarme diciéndole a mi madre que no me ...