1. Berenice causa de mi locura


    Fecha: 21/12/2020, Categorías: Fantasías Eróticas Autor: DENYS PERVERSO, Fuente: CuentoRelatos

    ... de mis anteojos fije mi vista para contemplar su figura en su sensual desfile. Si esto continuaba seguramente me volvería loco. Que lindas nalgas lucia Bere, sus enormes cachetes bailaban adornados por unas pantaletas rojas. Antes de desaparecer en las escaleras, volteó y me descubrió observándola de forma lasciva.
    
    Me apené un poco, pero ella me regalo una sonrisa, acompañada de un guiño y termino de ascender desapareciendo de mi vista. Permanecí en mi escritorio durante dos largas horas. Cansado y somnoliento me retire a descansar. Al entrar a mi cuarto me encontré con una grata sorpresa, con la luz encendida Berenice estaba recostada en mi cama. No se había cubierto con las cobijas quizá un tanto acollarada, su bata desparramada en los costados dejando su cuerpo totalmente descubierto. Me fue imposible apartar mi vista de aquel delicioso y juvenil cuerpo. Permanecí como estatua contemplándola a distancia. Sus piernas entreabiertas y mis ojos fijos en ese sitio donde sus piernas se juntan, y que yo observaba deseoso y perturbado. Salí un momento de la habitación lo mejor sería dormir en otro sitio.
    
    Fumé un cigarrillo intentando matar mi estado nervioso. Hice aseo a mi boca y me fui a la otra habitación. Tengo que confesar que en el fondo lo que realmente temía era verme rechazado por Berenice me enamoré de ella como un loco en tan solo unos días. Eran miles de pensamientos los que desfilaban por mi mente. Preso en mi propio mundo deseando que esa situación se me ...
    ... tornara favorable. Desperté tarde, ya se me estaba haciendo costumbre. Escuché ruido en la puerta e irrumpió Bere con una charola con el desayuno. Iba perfectamente vestida seguramente después de un buen baño.
    
    —buenos días dormilón.
    
    —buenos días te advierto que esto se puede volver una mala costumbre.
    
    —¿Qué tendría de malo ocuparme de ti?
    
    —nada por supuesto pero hace tanto que nadie me consiente, que me resulta extraño.
    
    —yo te voy a consentir todo lo que quieras porque quiero que tú me consientas igual, me hace falta sentir tu cariño.
    
    Terminé mi desayuno y me salí a solucionar algunos problemas y a tramitar una tarjeta de crédito para Berenice. Trabajé tanto para el dinero para no tener problemas económicos al hacerme mayor, tenía bastante y podía compartirlo con ella sin problemas. Además, seguía recibiendo algunas regalías que no permitirían que se terminara mi fondo. Me encontré con unos amigos y fuimos al bar a tomar algunas copas. Entre charla copas y humo se fueron las horas sin sentir. Llegué pasada la media noche a casa. Berenice se había acostado a dormir. Estaba cansado, alcohol nunca lo he tomado en exceso fueron a lo más tres copas. Fui a mi habitación por fortuna Bere dormía en el cuarto contiguo. Me dejé caer sobre la cama sin librarme de mi ropa. No sé cuántas horas pasaron no me fije en el reloj. Me dolía la cabeza como si se tratara de la resaca. No, no es la resaca definitiva me siento mal. Me levanté sintiendo que el aire me faltaba y al abrir ...