MI DULCE Y APASIONANTE ESPOSA TERESA 7
Fecha: 04/02/2021,
Categorías:
Confesiones
Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos
Ya en casa fue inevitable hablar con mi joven esposa. Al mirarla, percibí un temblor y una resolución que nunca había visto en ella.
- “Que pasa contigo Tere, ¿quieres decirme algo?”
- Mi esposa me miró, diciéndome de improviso: “Diego, quiero ser puta”
- “¿Quieres ser puta? Tere, ¡¡Eres mi esposa, y que va a decir tu familia de mí!!
- “Diego, tu y mi familia me conocen, yo no deseo ser una puta, soy una puta”
- “¡¡¿Qué?!! ¡¡¿Que dices, por qué me dices eso?!!
- “Diego, cuando tú me conociste, yo tenía 15 años, y aún era virgen. Pero desde pequeñita, sentí que la verga me gustaba. Pero no quería ser como mis amigas, que desde niñas se dejaron culiar. Yo quería crecer, tener el cuerpo que tengo ahora, para convertirme en una mujer hermosa. Siempre fue así, desde chiquita me hacía maquillajes, ensayaba baile y pasarela, contoneándome, y simulando que ya era una puta. Todo esto vino del apego que tengo con mi tía Mafer. Ella; como tú sabes, es puta, la puta más linda de mi pueblo. Ella vivió desde joven con nosotras, y desde que ella se hiso de esa profesión, yo estuve cerca de ese ambiente, gustándome cada ves más,… hasta que te conocí”
“Cuando me casé contigo pensé: “El me ha salvado de mi idea de prostituirme, …pero no fue así, y desde que me hiciste el amor por primera vez, yo sentí un cambio, y ahora estoy cada ves más desenfrenada. Pero tú…en vez de hacerme daño, me has comprendido y protegido. Te amo mi amor, eres lo máximo”
- Yo, completamente ...
... conmovido, estaba atónito. ¡¡Ella era tan sexy, tan linda, y tan ingenua!! Entonces la abracé con ternura diciéndole: “Te amo mi niña”
- “Diego, te adoro; sin ti mi vida no tendría sentido” Me dijo.
- Yo, mirándola fijamente, le pregunté: “Y ahora, ¿Qué quieres hacer?”
- “Diego…quiero que me hagas puta”
- “Pero Tere: ¡¡Tienes 16 años, eres menor de edad!!”
- “Tú tienes contactos, amigos, ¿no podría salir algo?”
- Mirándola, me dije a mi mismo que ya nada podía cambiar este camino. Solo le respondí pensativo: “Déjame ver qué puedo hacer”.
Con toda decisión hurgué, busqué, y hablé. Y como con plata baila el perro, dos días después llegué con un certificado original de nacimiento que decía que Tere tenía 18 años. “Salgamos, vamos a la oficina de identificación” le dije. Al cabo de tres horas, Tere salió con su documento de mayoría de edad.
Luego, me volvió a sorprender diciéndome: Yo no quiero ser una puta de la calle, acompáñame a sacar mis documentos. Y fuimos a profilaxis, pasó los exámenes, y luego de dos días le dieron su carnet de trabajo. ¡¡Ya era legalmente puta!! Ella parecía haber madurado mucho, en poco tiempo.
- “Diego, estoy temblando, quiero que me ayudes a debutar, pero no quiero hacerlo en un prostíbulo, esos hombres me verían, y me harían el amor hasta matarme”
- “¿y que se te ocurre?” le respondí.
- “¿Podríamos adecuar el piso superior de la cabaña, y hacerlo allí por unos días?
Y pasando de mi anterior función de cornudo y ...