La sobrina de mi esposo (IV) - Relatos Eróticos

La sobrina de mi esposo (IV)

... enserio pero Natalia pensaba que era una broma pues estaba cortada.

La noche siguió y efectivamente Alex intentaba convencer a Natalia de quedarse se les veía cuchicheando a cada rato y ella se coloreaba pero aun así amenazaba con que lo mejor era irse y Alex la embolataba con otro trago, lo que no fue muy difícil pues se notaba que querían hacer algo pero ella era la que le daba pena, cerca de las dos de la mañana Natalia me pidió que la acompañara al baño con el pretexto de necesitar que le prestara una toalla pues se sentía que tenía arena de playa que le incomodaba y quería sacudirse, cuando entramos me pregunto si era verdad que se podían quedar, -claro que se pueden quedar y si es por ropa nena yo te presto mía, traje varios conjuntos que seguro te gustaran y volverán loco a Alex jajá nos reímos las dos, pasamos a la habitación y busque en el armario la ropa pero la verdad no saque ninguna piyama saque la lencería que había llevado para esos días, pues tenía tres que traían albornoz semitransparentes dos de mangas negro y vino tinto y uno sin mangas negro de encaje muy hermoso; Cuando los puse encima de la cama me hice la tonta no miraba a Natalia como si con eso durmiera siempre – cual quieres escoge tu primero el que quieras te quedara genial, -¡Noo muñeca como se te ocurre que me voy a poner eso nunca los he usado!, sé que estaba muy colorada además que el licor ya hacia su efecto, -nena estas de vacaciones con tu esposo, si no los usas con el entonces con quien ...

... lo vas a hacer?, yo me pondré uno también para acompañarte preciosa, no musitaba una silaba, -yo te aconsejo éste vino tinto es muy lindo combina con tu color de piel, y yo me pondré este negro de encaje sin mangas, anda pruébatelo, sin mirarla se lo entregue en la mano me quite la blusa que tenía y la falda mientras ella miraba como me desnudaba en su presencia midiéndome el que escogí, me sacudí la arena y cuando estuve desnuda la mire por primera vez viendo como sudaba frio, – no te gusto prefieres ponerte el que escogí?, se quedó paralizada se notaba que estaba muy nerviosa, -no entiendo cuál es tu miedo si eres una mujer muy hermosa o crees que no he visto cómo te miran los tipos, si es tu esposo el que se deleita que más quieres o prefieres que solo me mire a mí?, al verla automáticamente empezó a quitarse su ropa y midiéndose lo que le pase, la observe por primera vez, unos senos hermosos redondos con pezón café y aureola pequeña, una cola muy grande y redonda sus piernas mostraban celulitis pero su belleza era tan natural que se veía agradable su armonía, me vestí al mismo tiempo que ella quedándonos viendo ambas, – como eres de hermosa y sin una muestra de celulitis me da mucha vergüenza que me vea así tu esposo me decía por primera vez Natalia, -pero tú te vez muy hermosa con ese juego tus senos y tu cola son increíblemente sensuales, créeme que Alberto te dirá que eres muy sensual y hermosa si te descuidas te va a tocar y yo no me voy a disfrutar si lo hace nena, se ...