1. El día que cambió mi vida (Tercera parte)


    Fecha: 05/03/2021, Categorías: Confesiones Autor: Martz Santo, Fuente: CuentoRelatos

    ... boca, luego senti como pasaba su navaja por todo mi pene y me empezó a cortar todo el vello púbico, me dejó pelón, yo pensé que me lo iba a cortar y empecé a gritar desesperado, pero me dio dos nalgadas tan fuertes que me hizo callar, luego me giro y quede boca abajo, luego sentí como con sus dos manos recorría todo mi cuerpo los glúteos, la espalda, mis tetas, mi ojete.
    
    Abrió mis nalgas y escupió, sentí como su nariz, luego su lengua perforaban mi entrada y una como descarga eléctrica recorrió todo mi cuerpo, me estremecí de pies a cabeza al sentir como su lengua recorría todo mi esfínter y luego penetraba poco a poco, aquello me excito y mi pene comenzó a crecer, yo nunca había sentido algo semejante y entonces comencé a gemir, mi ano empezó a querer recibir más y más y se levantaba para abrirse para dejar entrar a aquel extraño que lo hacía sentir tal deleite.
    
    Luego comenzó a meter uno, dos y hasta tres dedos, mis nalgas respondían solas y buscaban más y más que entrara ese extraño amigo, cuándo sintió que ya estaba lo suficientemente dilatado apuntó su arma directamente a mi entrada y de un solo golpe me la metió, solté un grito lo más fuerte que pude, pero no sé oyó nada debido a que estaba tapada mi boca, pero yo sentí que me estabán partiendo en dos, aquel monstruo era enorme y senti que me abría en canal.
    
    Solo cuando oyó mis gritos apagados tuvo la delicadeza de detenerse un momento y esperar a que mi esfínter se acoplara a su tamaño, cuando observó que ya ...
    ... no me agitaba, empezó un suave meter y sacar lento para gozar y disfrutar mis nalgas que para ese momento ya empezaron a disfrutar la entrada y salida tan suave, tan armoniosa de aquel enorme tronco que me abría en dos, estuvo así mucho tiempo no sé cuánto pero yo me sentía loco de placer tanto que ni sentí cuando me vine, de pronto se abrazó fuertemente a mi, aceleró el ritmo apretó mis tetas, mis pechos y me inundó con todo su semen, fue tanta la cantidad que yo sentía que me salían chorros, no sabía si era semen o era mi sangre, espero un rato hasta que se calmó su leche y después se salió.
    
    Yo sentía mi culo totalmente abierto y estaba tan adolorido y cansado que de nuevo me quedé dormido... Al despertar estaba totalmente vestido, libres mis manos de toda atadura y también mis pies, al querer ponerme de pie no pude porque mis pies me temblaban y de pronto alguien me ayudó a levantarme y cuando alcé la vista vi un hombre andrajoso, sucio que me sostuvo y me ayudó a ponerme de pie, le agradecí y le pregunté por su nombre, me dijo que se llamaba Pedro y que a veces dormía ahí en el parque y me pregunto porque estaba yo allí que si no sabía que ese era un lugar muy peligroso porque ahí continuamente violaban a las personas así como a mí y a veces amanecen muertos.
    
    Le dije que yo no lo sabía y le agradecí por su ayuda y le pregunté que si no sabía quién me había vestido y me dijo; yo fui porque te dejaron todo desnudo con la ropa levantada pero vivo, que eso era una suerte ...