1. El Principio del fin 5 (no regresamos a casa, ninguno de los tres)


    Fecha: 18/03/2021, Categorías: Masturbación Autor: Avariciasex, Fuente: CuentoRelatos

    ... revivir la experiencia de hace algunas noches. Y así fue, de repente dos mujeres impresionantes aparecieron por la puerta del bar. Lidia llevaba el pelo suelto y un vestido de tirantes amarillo largo sin abertura, que moldeaba su cuerpo como un escultor moldea la arcilla. El escote era de infarto, su canalillo se extendía más allá de lo que la vista veía, así que la imaginación volvía a trabajar, generando un erotismo increíble en mi mente calenturienta. Por su parte Alba, llevaba un vestido rojo, con un escote en forma de uve que le llegaba al ombligo, y su falda tenía dos aberturas, que hacían un manjar para los ojos ver como se contoneaba a cada paso que daba. Las dos se acercaron a mí, Lidia fue la primera en besarme, cosa que me excito bastante y al separarme de ella, Alba me dio un suave y profundo beso húmedo que me excitó aún más. Me encantaba notar como todos en el bar me miraban, y pensar que a más de uno le gustaría cambiarse por mí.
    
    Una cena tranquila, un paseo relajado y entramos a la sala de baile que Lidia había buscado para nosotros. La noche empezó relajadamente, pero un tema musical que empezó a sonar, lo cambio todo. Las dos mujeres se dirigieron apresuradamente a la pista y empezaron a bailar. Al cabo de dos o tres canciones, las dos bailaban muy sensualmente, dirigiendo de vez en cuando la mirada hacia donde yo estaba sentado. Esto como es normal me tenía muy excitado, más después de que un par de chicos se acercaran a bailar con ellas. Lidia y Alba ...
    ... ahora estaban bailando con dos desconocidos, sus movimientos sensuales hacían que los tipos se miraran y sonrieran como si ya las tuvieran en el bote, hasta que Lidia me hizo un gesto para acercarme a la pista. Yo me levanté y me acerqué, ella fue la primera en abrazarme y besarme. Alba por su parte me agarró por detrás y comenzó un baile sensual muy excitante. Aquellos tipos no se lo tomaron muy bien, y empezaron a increparme, las chicas asustadas querían poner paz, pero uno de ellos me dio un puñetazo directo a la cara que me dejó grogui por momentos.
    
    Después de aquello, las dos se empeñaron en que fuéramos al hospital, y después de unas horas volvimos a descansar al hotel. Tenía el ojo bastante magullado y el médico me mando a descansar, por lo que mi noche de saxo, se había ido al garete. Las chicas me desnudaron, me tumbaron en la cama y me mandaron descansar. Ellas se cambiaron y se sentaron conmigo en la cama, Lidia solo llevaba un tanga negro y Alba llevaba un conjunto de color rosa con lacitos negros que le quedaba genial. Entonces Lidia me dijo…
    
    - ¿Te duele mi amor? No creía que las cosas iban a acabar así. ¡Lo siento! Nosotras te cuidamos.
    
    Y empezó a acariciarme el pecho. Entonces Alba comentó…
    
    - Y si le damos un masaje para recuperarlo de los golpes.
    
    Lidia asintió con la cabeza, se levantó y fue a buscar un bote de aceite corporal perfumado, mientras me dijo…
    
    - Date la vuelta y relájate, te vamos a dar un masaje.
    
    Yo obedecí sin rechistar y ...