No olvides que te amo.
Fecha: 03/11/2017,
Categorías:
Fantasías Eróticas
Autor: coshibaby, Fuente: CuentoRelatos
... realmente grande y también grueso, el gemía un poco al sentir mi trabajo, pero no decía muchas palabras, creo que por que yo ya estaba un poco mas consiente y habría reconocido su voz, yo imaginaba que se sentiría tenerlo entre mis piernas y cabalgar sobre esa vergota, pero aun no podría destaparme los ojos, el muelleaba frente a mí metiendo y sacando su pito de mi boca, se coloco sobre mi y tomo mis tetas con ambas manos y las junto, se masturbaba el pito entre ellas a la rusa y la punta se estrellaba violentamente sobre mi cara.
Se volvió a alejar de mí, yo ya sabía que era lo que seguía, la curiosidad me mataba imaginando de quien se trataba, pero no destapaba mis ojos por miedo a arruinar el momento y no sentir a ese toro en mi regazo, abrí las piernas como esperando la envestida y comencé a sentir como se acercaba cauteloso por la cama, se coloco sobre mi y nos dimos un apasionado beso, mis manos se posaron en su rostro y pude distinguir un poco sus rasgos, su barba corta y su fina y gran nariz, pero no fue suficiente para adivinar su identidad; fue colocando poco a poco la punta de su pene sobre mi clítoris, lo masajeo suavemente con esta y descendió hasta el orificio, poco a poco fue introduciéndolo, centímetro a centímetro sentía como me ensartaba y mis sentidos estaban a flor de piel, una vez que su miembro estuvo completo dentro de mi comenzó a moverse, lentamente y mientras lo hacía apretaba mis tetas, el muelleo se fue haciendo más intenso y violento, gemía y ...
... gritaba de éxtasis, el se detenía dentro de mí para prolongar el placer, sentí múltiples orgasmos y venidas, mi vagina estaba extasiada, dilatada y vibrante queriendo mas y mas de él.
Me cambio de posición, me puso en cuatro y me comenzó a dar de perrito, me apretaba las nalgas y con su lengua me dilataba el culo, me seguía atravesando con intensidad y uno de sus dedos comenzó a introducirse en mi culito, estaba realmente caliente y recibiendo la cogida de mi vida, su dedo se comenzó a mover y recibí también placer por el culo, se movía cada vez más rápido y supuse que ya casi se venía, con la otra mano comenzó a masajearme el clítoris en círculos y no dejaba de meter y sacar el dedo del culo y claro de cogerme la concha con maestría, me vine unas tres veces seguidas y él se seguía moviendo cada vez más a prisa hasta que se detuvo, sentí correr un liquido viscoso sobre mi boca y mis tetas saboreé mis dedos y recorrí con las manos mi pecho agradecida por la sesión, pensé que eso había sido todo y me recosté.
Fui sorprendida por sus brazos fuertes de nuevo, el estaba recostado junto a mí y me monto de espaldas a él y con movimientos fuertes me levantaba y me soltaba directo sobre su verga, yo le ayude un poco con mis piernas y él me apretaba las bubis por turnos, ya no pensaba en destaparme los ojos, me vine de nuevo, gritaba y mi piel se erizaba a cada instante, el controlaba sus gritos y solo escuchaba pequeños gemidos al oído que me excitaban, cambio de posición y me ...