La nueva socia del gimnasio
Fecha: 31/05/2021,
Categorías:
Infidelidad
Autor: zorro_en_celo, Fuente: CuentoRelatos
... un poco tonteado con una mujer de estas características. Al salir ella vestía sexy y provocadora con una blusa que empezaba desde los hombros y llegaba hasta menos de media rodilla, con un par de gafas oscuras y unas muy sexys sandalias con cintas de oro. Salimos en dirección a su casa y me dijo que no vivía muy lejos del gimnasio. Me contó que llevaba un año viuda, que hacía tiempo que no se aireaba, pues se sentía triste por la muerte de su marido y que quería poco a poco salir con hombres y que mejor manera de empezar a conocerlos que en un gimnasio y no la vulgaridad de siempre de ir a las discotecas.
Seguimos andando y charlando. Llegamos a su casa, nos metimos con presteza en el ascensor y ella se abalanzó sobre mí y empezamos a comernos a besos. Me puse muy caliente y cachondo y se me hizo "la tienda de campaña" en el muy ajustado slip que yo usaba. Al salir del ascensor ella lo tocó y rio divertida. Marchó hacia su habitación y yo me quedé en el salón a esperarla. Cuando regresó, venía de la cocina y me ofreció whisky para que me relajase, mientras daba sorbos, veía los cuadros y fotos que allí había, pero nada presagiaba lo que me esperaba. Cuando más distraído estaba, esta zorra madura apareció como una verdadera zorra en celo, llevaba un provocativo sostén negro muy sexy con florecitas y un tanga muy lascivo con los mismos colores. Ella me empezó a desnudar lenta y lascivamente hasta dejarme solo con mi mini slip rojo.
Nos empezamos a besar con lengua y ...
... lujuria y le fui quitando el sostén mientras le chupaba una teta y luego otra y luego le lamía y besaba sus nalgas, le seguía comiendo las tetas y ella me tiraba del rabo con avaricia lujuriosa, para luego lamerle otra vez las nalgas, hasta que ella se quitó el sostén y más tarde el procaz, obsceno y libidinoso tanga. Soraya me quitó el slip. Yo le comía el coño, mientras ella tiraba del clítoris y yo le comía y lamía totalmente los labios vaginales exteriores e interiores y la apertura vaginal mientras ella había caído en un paroxismo sexual y me insultaba sexualmente…
—eres un cabrón, me estás matando de gusto —afirmaba entre gemidos— hacía tiempo que no sabía lo que era un macho como tú —mencionaba entre jadeos.
Yo la seguía comiendo el coño. Subí a comerle las tetas y ella seguía exhalando y resollando de placer y soltando insultos sexuales. Cuando ya estuvo más lasciva, le di un fuerte empellón y mi verga fue tragada por su profundo coño y ella desfallecía de placer y seguía soltando palabras soeces cual zorra de burdel.
—eres un malnacido hijo de puta, hacía más de un año que el cabrón de mi marido no me follaba y se fue al otro mundo casi sin haberme catado.
Yo alucinaba con lo que ella soltaba entre vagidos, sollozos y sofocos y no paraba de taladrar aquel palpitante coño. Luego se metió mi rabo en su boca y mamaba mi rabo mientras se sobaba y tocaba su clítoris y vagina durante un rato. Yo la llamaba zorra y fulana y ella me besaba con lengua y me lo agradecía ...