1. Nuevo encuentro en El Edén


    Fecha: 25/08/2021, Categorías: Infidelidad Autor: Urawan, Fuente: CuentoRelatos

    ... ángeles nos esperaban ansiosos entonando hermosos cánticos de bienvenida. En lugar de la gran pira, había una fuente de agua purísima, a un costado pude ver hermosos ropajes seguramente confeccionados por ángeles de amor. Ropajes blancos más blancos que la nieve más pura cosidos con hilos de oro, decorados con nácar, perlas y un sin fin de joyas.
    
    Tangay subió a su cubil para esperarme. Antes de entrar a su morada debía ser renacido, antes de entrar en sus aposentos debía dejar todo lo pasado y acudir a sus brazos límpido lo más puro posible.
    
    Sus doce acompañantes me rodearon. Fe, Continencia, Fortaleza y Paciencia me despojaron de mis vestiduras terrenas, me tomaron de las manos y me condujeron a la fuente para que renazca en Yahvé, me introdujeron en ella tanto tiempo que me pareció que mi vida se iba a quedar en esa fuente ya cuando mis fuerzas flaqueaban me renacieron, me vistieron con los ropajes que me habían estado esperando.
    
    Fe me expreso:
    
    -¡Urawan! Puedes pasar haz renacido en Yahvé, estas puro de cuerpo y alma, júntate con el ser que te ha estado esperando. Ella con el beneplácito de nuestro Amo y Señor, Yahvé te ha traído al Edén, ahora no luego. Ella no podía vivir más sin ti sabiendo que dejas en la tierra gente que te llora y se pregunta: ¿Por qué? Ya lo comprenderán y serán felices al saber que tú eres feliz.
    
    Uno a uno fui subiendo los escalones que me separaban y acercaban a mí ser amado. Mi corazón latía a cada escalón ganado con más ...
    ... fuerza. La música que habíamos escuchado cuando nos amábamos en la tierra volvió a sonar. Allí estábamos frente a frente, cuerpo a cuerpo, mente a mente, espíritu a espíritu. Nuestras trilogías enfrentadas buscaban acoplarse.
    
    -¡Tangay! Al fin juntos para la eternidad.
    
    -Sí amor ya nadie ni nada nos podrá separar.
    
    -Yahvé bendito seas.
    
    -Sí mi amor lo nuestro es porque Él lo ha determinado.
    
    -Te amo, nunca dejé de amarte.
    
    -Yo igual.
    
    El lecho nos llamaba, parecía que nos decía:
    
    -¡Ámense! Vengan a mi estoy presto a cobijarlos y receptar todo su amor, acudan a mí los he esperado largas eternidades. Como no hacer caso al pedido, que más podíamos hacer sino amarnos, en mi mente se avivaron nuestras hermosas vivencias eróticas terrestres en el portal de su morada, en su lecho no conocido por otro ser, en su apartamento en Mindo o Guayllabamba o en cualquier lugar solitario que se prestó para amarnos, allí nos buscamos, allí nos encontramos, allí nos conocimos, allí intercambiamos nuestros seres íntimos. Como poder olvidar cuando al sonar de cantos sacros allí cubiertos por cobijas eróticas nuestros sexos destilaban fluidos divinos y daban alabanzas por habernos juntado, extasiado eróticamente.
    
    La recepción por mi llegada fue magnífica. Ángeles y arcángeles bailaron sonatas divinas. Gustamos los manjares más exquisitos. Yahvé nos bendecía y se complacía…
    
    Al fin, juntos y solos luego de tanta diversión divina. Su cuerpo se me ofrecía. El mío estaba presto para ...
«12...567...»