1. GERMAN, DEGUSTADOR DE CULITOS TIERNOS MI PROFESOR ME SIGUE ENSEÑANDO.


    Fecha: 08/09/2019, Categorías: Gays Tus Relatos Autor: GERMAN, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... ropa.
    	Avanzamos hacia la sala en esa posición, mientras la ropa empezaba a quedar en el camino, zapatos, pantalones, polera. Ya sus manos tocaban directamente mispartes intimas, metiéndolas entre mis boxer y yo sintiendo su pene erecto entre mis piernas y mis nalgas. Una de sus manos tomó mi verga y empezó con una suave masturbación que terminó de encenderme.
    	¿Quieres seguir aprendiendo todo lo que te puedo enseñar?. Si, todo, respondí. ¡Quiero saber todo!. Indudablemente no sabía lo que estaba aceptando y después ya sería tarde para arrepentirse. Ricardo no esperó a que se lo dijera de nuevo. Me desnudó por completo y él hizo lo mismo y me acomodó boca abajo apoyado sobre el sillón. Se fue a mi culo el cual suavemente abrió con ambas manos y aplicó su humeda lengua en él. Un escalofrío recorrió mi cuerpo y un suspiro se me escapó. Hábilmente empezó a chupar, besar y lamer mi virginal huequito arrancando a cada paso suspiros y gemidos de mi boca y ya adivinando lo que vendría, pero era tarde para arrepentirmey en todo caso no puedo negar que el deseo de aprender me consumía.
    	De pronto siento que ya no es sólo su lengua la que se desliza por mi rajita, es un dedo y luego dos los que primero tocan y luego se empiezan a introducir sueve y lentamente produciéndome un cosquilleo. Poco a poco los siento introducirse a zonas mas profundas, con lo que nuevamente se me escapa algunos gemidos. Ricardo toma algo desde la mesa de centro y siento me aplica algún ungüento suave ...
    ... aunque algo helado. Se acomoda y siento nuevamente su dedo.........NO, NO es su dedo el que se ubica entre mis nalgas, la presión por entrar me hace entender que es su verga  que lentamente se va clavando en mi virginal culo, el cual se va entregando ante la presión de aquel invasor, que arde en deseos de profanar por completo mi intimidad.
    	¡Así mi bebé, cómelo todo que veras que rico que es! Dime si te duele, me advirtió, y si bien me producía alguna molestia era soportable. Además el pene de Ricardo no era tan grande pues bordeaba los 16 cms y mas bien delgado, por lo que lo seguí recibiendo sin nada decir. Centimetro a centímetro sentía como iba horadandome y a la vez quitandome la virginidad anal, lo cual no me importaba en aquel momento ya que me gustaba lo que estaba viviendo.
    	En un momento, dió un fuerte impulso que si me produjo un dolos y mi protesta, pero él se quedó quieto y yo senti su pelvis contra mi culo. Estiré mi mano hacia atras y pude sentir que su piel estaba junto a la mia, y al meter la mano sólo senti sus pelos que yo sabía rojos y el tronco de su pene muy pegado a mi, con lo que entendí estaba completamente ensartado.
    	Me pasó un brazo por el pecho y otro por la cintura y me empezó a follar, primero lentamente y aumentando el ritmo. Sentía la intensidad de la clavada, la invasión de aquella verga en mi culito, una cosquilla junto con un ardor. Un aroma y una sensación de calentura indescriptible. Mete saca, mete saca. ¿Te gusta mi bebe? SIIII, me ...