Protegiendo a mi tía Lupe 4 - Relatos Eróticos

Protegiendo a mi tía Lupe 4

... decía como no se despierta el imbécil de mi marido para que vea lo que le hacían a su mujer pero nada el seguía durmiendo pero esas manos sabían como tocar a una mujer mal atendida en la cama y sobre todo con mucho rencor hacia su esposo. 
Y me dejé llevar por la excitación pero para evitar la vergüenza y se dieran cuenta que lo estaba disfrutando me hice que no me daba cuenta de la situación, pero cuando tu mi Alberto bajaste buscándome a la sala ellos se asustaron y se fueron creí que ahí se había acabado todo pero me equivoque porque tu me seguiste tocando al igual que ellos yo ya estaba bien caliente y ahora me moría de miedo que tú te dieras cuenta que me había dejado tocar por esos hombres como despertar de frente, pero luego al sentir tus manos me empezó también a gustar y solo continué haciéndome la dormida. 
Sabía que a tus 15 años era normal que tú también te excitaras rápido y sólo culpe en ese momento a Julián de todo por traer a sus amigotes a la casa por obligarme a tomar con ellos y luego ellos se aprovecharon de las circunstancias, si tenía vergüenza con esos hombres y no los podía detener imagina contigo que eras mi niño él que siempre era más apegado a mi, ahora ya era todo un jovencito que me estaba tocando. 
Y mi gran amor hacía a ti dejé que lo hicieras pero no te sientas mal porque también me gustó eras tan cariñoso que lo disfrute mucho ahora como mujer porque eso cuando fui a despertarme te dije que el único gran culpable era Julián. 
Creí que todo ...

... se iba a quedar así que jamás te enterarías de cómo fueron las cosas y yo guardaría silencio por siempre, pero luego de la muerte de mi marido se volvieron a repetir las cosas pero ahora sí no quería que esos hombres siguieran pero no me hicieron caso y con su fuerzas de hombres me estaban tocando y creí que ya no tenía salvación porque mi sobrino estaba borracho y está vez no los iba a detener pero estaba muy equivocada porque bajaste y los enfrentantes como todo un hombre haciendo que huyan con el bate de béisbol en la mano te comportantes como nunca lo hizo Julián. 
Luego cuando sentí tus manos y tus caricias eran las de mi pequeño que me había protegido de esos dos miserables y no podía detenerte así que otra vez me hice la dormida y no te voy a negar que sentía muy rico lo estabas haciendo muy bien ademas mil veces prefería que fueras tú que te quiero mucho que un extraño pero me dejé llevar por lo excitada que ya estaba que te acaricie el cabello y te hablé y tú te asustaste y te fuiste. 
Yo estaba ahí desnuda y caliente y no quería quedarme así, y venciendo la vergüenza te llame y bueno tú ya sabes el resto de la historia... ¡

Me quedé totalmente asombrado o sea todo ese tiempo mi tía sabia que yo me la había cachado y me estaba enterando que le había gustado, algo escuche una vez en la cocina cuando hablaba con mi madre y ella preguntó como era su vida sexual con su marido y le contestó que era pésima que solo se subía terminaba y nada más, en ese entonces a los ...