UN VETERANO ME PARTIO AL MEDIO - Relatos Eróticos

UN VETERANO ME PARTIO AL MEDIO

Hola amigos, soy Camila nuevamente. Sigo compartiendo mis vivencias sexuales con ustedes, les quiero contar de uno de mis amantes en el primer año de la universidad. Si bien tenía mi perro conmigo para satisfacerme, tenía que empezar a conseguir un macho que me taladrara el culo ya que no conocía a ningún hombre en la ciudad y ya llevaba como dos meses ahí. Solo había tenido la suerte de una visita hace un mes de mi vecino Carlos para satisfacer mi trasero de verga.

Estaba en contacto con una excompañera de secundaria que estaba alquilando como a 15 cuadras de donde yo vivía, quería viajar al nuestro pueblo así que me pide que le hiciera el favor de dar una vuelta por su departamento para ver que este todo bien ya que se ausentaba por una semana. Su departamento quedaba de pasada entre la universidad y mi casa, por lo que no me costaba nada llegar por ahí. Me manejaba preferentemente a pié, a menos que esté lloviendo, donde tomaba un colectivo o taxi de acuerdo al horario. Los martes salía muy tarde de clases así que me quedaba piola quedarme a dormir en su departamento que gastar en taxi para llegar a casa. Cuando estaba llegando al edificio se estaba estacionando un remiss en la cochera, que era por donde me quedaba mas practico para acceder. Primera vez que veía a este vecino de mi amiga, un gigante veterano, de los que a mí me gustan. Era un moreno bien elegante, a pesar de su exceso de peso y sus canas color cenizas, que vestía en ese momento un traje celeste claro ...

... que lo hacía ver muy bien. Era inevitable no mirar su entrepierna, donde parecía extrangulado su gran rabo por la presión del pantalón, cualquier persona lo podría notar, no solo una mujer cachonda. Parecía que tuve un golpe de suerte al encontrar este veterano,  nos saludamos en el ascensor pero no tuve tiempo de encarar tema de conversación ya que me baje en el quinto piso, el siguió al sexto. Debía saber quien era y como llegar a él, ya pasaban imagenes por mi cabeza de como me cogería a este tipo, mientras cenaba un sandwich frio disfrutaba del porno en la compu y usaba una botella de gaseosa de medio litro como consolador.

Despues de una deliciosa acabada, me dí una ducha para relajarme y me fuí a la terraza donde había una hermosa vista de la ciudad y así disfrutar un poco de brisa en la calurosa noche,  por lo que me fui comoda con una calza corta y un top deportivo que mostraban mi figura marcada y tonificada. Al abrir la puerta me encuentro al veterano golpeando una bolsa de box mientras una mujer (que estimo debe ser su esposa) le bombardeaba la cabeza con reclamos y quejas, por lo que me dirigí hacia el otro extremo de la gran terraza donde practicamente no escuchaba lo que decían,  me coloque auriculares para escuchar música mientras miraba el paisaje. No tuve en cuenta el tiempo que pasó, seguía haciendo calor,  y él se me acerco. Nos saludamos cordialmente y lo primero que hizo fué pedir disculpas por espectaculo que presencié, a lo que le respondí que no tenía ...