Descubriendo por primera vez los aseos públicos.
Fecha: 28/11/2019,
Categorías:
Gays
Tus Relatos
Autor: Danisampedro91 , Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... mordiscos.
Yo me retorcía de placer, mientras con mi mano agarraba su polla y la acariciaba, dejando que me fuera lamiendo y mordisqueando todo el cuerpo. Gemía como una gatita en celo esperando que me hiciera suyo desvirgándome con aquella polla que tanto deseaba.
El siguió torturándome con su lengua y dientes, hasta que llegó a mi polla, se la metió a la boca, empezando a chuparla.
¡Ohhh! Gemí agarrándome a la cabeza de aquel hombre, ¡ooohhh! Volví a gemir mientras me abría de piernas todo lo que podía, notando como su mano acariciaba mis huevos y sus dedos hurgaban en mi orificio.
¡Ufff! Pues sí que es verdad maricón, aun eres virgen, decía aquel hombre sacando mi polla de su boca y escupiendo en su mano. Volvió a meter mi polla en su boca, llevó su mano a mi ojete, la pasó lubricándome con su escupitajo, intentando de nuevo meter un dedo en mi orificio.
Yo gemía agarrado a sus hombros abriéndome las piernas todo lo que podía, mientras él me chupaba la polla y intentaba abrirme el culito con su dedo. Tanto era el gusto que estaba sintiendo, que nada más entrar en mi orificio la punta de su dedo, soltando un grito empecé a descargar todo mi semen, eyaculando dentro de su boca.
¡Ohhh! ¡ooohhh! Me corro, me corro, gritaba vaciando el esperma que contenían mis huevos sobre la boca de aquel hombre que intentaba desflorarme.
Cuando terminé de descargar todo mi semen, intenté subirme el slip y pantalón, pero aquel hombre no me dejó. ...
... Espera putito, espera, no tengas tanta prisa, al menos deja que me corra yo, me decía.
Me agarró por los hombros, haciendo que me agachara. Anda abre al menos la boca y chúpame la polla, ya que no quieres que te desvirgue, y te preñe el culito con mi leche, te la vas a tragar por la boca, maricón.
Nervioso y muerto de miedo, abrí la boca, dejando que metiera su polla en ella, y me follara hasta correrse dentro de ella.
Ya había probado el semen, y aunque no es que me encantara, tampoco era algo que me desagradaba.
Mientras le chupaba la polla de la mejor manera que sabía y podía, con una mano le acariciaba los huevos peludos que tenía. Así maricón, así, chupa, gritaba el hombre metiendo y sacando la polla de mi boca.
¡Ohhh que gusto! ¡ohhh que gusto! Gritaba mientras yo le chupaba la polla.
Los ojos me lloraban y por la comisura de mis labios me caían incesantemente las babas de mi saliva.
De pronto empezó a gritar que se corría. Abre bien la boca maricón, que ya me voy a correr. Ya, ya me corro, ¡ohhh que gusto! ¡ohhh que gusto! ¡ooohhh que gusto! Gritaba soltando trallazos de leche sobre mi boca y cara.
Así, traga maricón, traga. Trágate toda mi lechita, me decía metiendo su polla en mi boca dejando que terminara de soltar toda su leche, mientras yo con una mano le iba pajeando la polla.
Cuando ya no salía nada por su polla, y después de dejarle bien limpio y reluciente el nabo a aquel hombre, pasó su mano por mi cara y ...