Mi fantasía es eyacular sobre unas braguitas y una bella prostituta me lo cumplió. - Relatos Eróticos

Mi fantasía es eyacular sobre unas braguitas y una bella prostituta me lo cumplió.

... supondrán empezaba a tener una erección que traté de disimular para que la joven de la tienda no se dé cuenta, le volví a preguntar cual es la tanga más diminuta, ella se sonrió y me trajo dos modelos una de encaje y otra totalmente transparente, sin pensarlo dos veces escogí la segunda tanga, le pagué con efectivo y salí algo apresurado de la tienda, mantuve conmigo dicha prenda hasta la hora del encuentro con dicha mujer.
Eran como las 8 de la noche, estuve esperando unos minutos en un paradero cercano al hospedaje hasta que una chica de cabellos largos castaños se acercó a mí ¿tú eres Jorge? le respondí que sí, ella me contesta “Hola, soy Lania (era la prostituta con quien había hecho el trato) un gusto en conocerte", ambos nos dimos un beso en la mejilla y nos dirigimos al hospedaje.
Cuando entramos en la habitación Lania empezó a quitarse primero el abrigo y luego la blusa dejando expuesto sus enormes senos que sobresalían de su brassiere, después se empezó a quitar el pantalón jean que por cierto era ajustado y dejaba relucir su buen trasero, tenía unas braguitas color negro puestas pero sin transparencias, en ese momento aproveché para repetirle la pregunta que si cumplía fantasías sexuales, ella me dijo que sí todas las que yo desee incluso eyacular en sus senos o dentro de su boca, entonces le dije: 
- Quiero que me cumplas dos fantasías - le enseñé la tanguita transparente y le dije quiero que las pongas.
- ¡Qué bonita tanga, será un placer complacerte! ¿y cuál ...

... es tu otra fantasía?
- Cuando termine, deseo eyacular sobre la tanguita.
me quedó mirando unos segundos, pensé que talvez no estaría de acuerdo...pero recibí su respuesta para mi beneplácito:
- Sí está bien, puedes terminar sobre la tanguita.
Lania tomó la tanguita y se metió al baño para cambiarse, mientras yo me desvestía y quedarme desnudo sentado a la orilla de la cama esperando ansioso a que ella saliera:
- ¿Cómo le quedará? pensaba una y otra vez, hasta que al fin la puerta del baño se abrió.
- ¿Cómo me queda? ¿te gusta? Lania me preguntaba con una sonrisa dibujada en los labios.
Me quedé mudo por unos instantes e inmediatamente mis ojos se dirigieron a la entrepierna de Lania...me quedé sin palabras, ver su diminuta tanga transparente que dejaba relucir nítidamente la rajita de su vagina, mi pene se puso rígido en segundos, ella rio unos instantes por lo que acababa de ver, se acercó con una mirada lasciva, cogió mi pene entre sus manos:
- Veo que ya estás con las ganas... y empezó a chuparme el pene, ni mi ex enamorada me la había chupado como lo estaba haciendo ella, con su lengua recorría desde los testículos hasta la punta del glande una y otra vez para nuevamente metérsela en la boca, fueron como diez minutos de intensa mamada, tenía ganas de expulsar todo mi semen dentro de su boca, pero me contuve. Acaricié sus cabellos mientras le dije "deseo penetrarte" Después la eché sobre la cama mientras le habría las piernas y acercarme hacia su vagina, aparté a ...