Una tarde caliente - Relatos Eróticos

Una tarde caliente

... el consolador, empezó un nuevo vaivén, esta vez mucho mas suave de lo que fue con su papá, me gustó el como se movía, era incluso mejor y como sentía el semen y el juguete me sentía extasiada.
Ivan se corrió muy rápido pues era su primera vez, pero para ese momento yo ya estaba en la gloria, el sentir nuevamente el esperma caliente salir dentro mio me ocasionó un buen orgasmo que me dejo como tonta, finalmente el padre de Iván me “limpió” con su boca toda mi vagina y mi culo y nos dijo a Iván y a mi que esto se quedaría entre nosotros, claro que no dijimos nada de esa tarde, pero desde ese día iniciaría mis encuentros de sexo con mi amigo y de vez en cuándo con su padre o con ambos.