Sexo en mi ciudad: Zárate en Buenos Aires. Mi inicio 3 - Relatos Eróticos

Sexo en mi ciudad: Zárate en Buenos Aires. Mi inicio 3

... entrañas y me habría mas mi culo que cedía impotentemente, un pequeño alivio comende a sentir al sentir la boca de María en mi verga y distraer mi mente con el placer que sentía en su mamada.

Sentí su esperma como iba inundando mis entrañas y era una sensación de un alivio ya que comencé a comprender a mi mujer, su largo gruñido de que llego al orgasmo no disminuyo posteriormente su hombría, mantuvo su verga dentro de mi culo y a ritmo de un reguetón lento me bailaba y la sacaba y metía.

Comencé a sentir la noción de ser mujer mientras él seguía con su mete y saca y ahora lubricado con su propia leche, María siguió masturbándome y se dirigió a mi trasero en búsqueda de su botín, saco la polla y succiono el feto en ciernes con su boca, sentir que te meten la lengua después de que alguien se ha venido no tiene precio, la pomada de limpiarme el culo fue placentera,

Juan acerco su verga flácida a mi boca para que limpiara la leche restante, su ácido sabor se confundía con el sabor de mi propio ano, en un acto de caridad imprevista el tomo mi pija y comencé a masturbarme y a decirme que buena putita eres, dame tu leche, mi chorro seminal salió con una potencia que llego a mi cara, mas sorpresa me esperaban, Juan y María comenzaron a besarme y limpiar los rastros de mi corrida, sus dos lenguas y labios se disputaban mi leche y mis besos. una fusión perfecta.

Quizás sin pensarlo vire a Juan en una posición 69, le dije quiero comerte el culo y que sientas que soy tu ...

... inodoro, no esperaba que el obedeciera, pero lo hizo, su coño varonil rosado brillaba en su tez negra, le abrí el trasero mientras prácticamente él se sentaba arriba de mí y María le comenzaba a mamar su polla que saltaba de alegría al recibir dos mamadas al mismo tiempo.

Bueno que rico esta tu culo, que bien sabe, el frisionaba su esfínter en mis labios, di un salto al vacío al introducir mi lengua lo más profundo que pude, quería vencer la resistencia varonil de aquel macho de toyota que seguramente hace unas horas estaba trabajando como burro, quería cruzar la barrera de aquel culo virginal, sus gemidos comenzaron a oírse en el entorno de la habitación , hacia le mejor esfuerzo posible para abrirle el apetito, no pedí permiso , con una crema que tenía al lado me la puse en mis dedos, y cambie mi lengua por mis dedos, el siguió como si fuera una mecedora y aquel gesto me abrió el apetito por mas,  me levante de la cama y lo puse en 4 mientras María se ponía boca debajo de el en un 69 y le seguía mamando su verga , mi lengua y dedos hacían lo imposible para introducirlo al mundo bisexual , su culo ciertamente por los ejercicios que el hacía, era firme y redondo, por lo cual aceptaron de buena ganas aquel intento de cogida inicial.

-Si lo vas a meter hazlo ahora me dijo.

- Mi verga la pajee un poco mientras abría su esfínter y coloque la punta de mi chota en forma horizontal mientras veía como él se perdía en la concha de mi mujer y ella degustaba su verga. Es difícil ...