1. Buscando una polla que me follara, entré a los aseos públicos.


    Fecha: 08/04/2020, Categorías: Gays Tus Relatos Autor: Danisampedro91, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... piernas, y aquella monstruosidad de verga ensartada en el culo, sodomizándome una y otra vez.
    
       Mi polla no paraba de gotear semen, salpicando aquella pared, cada vez que el hijo de puta me ensartaba la polla dándome por el culo. No tardaría mucho yo en empezar a correrme, ya que notaba como poco a poco me iba subiendo una sensación de placer que iba creciendo en los huevos y en mi culito, e iba subiendo por mi polla.  
       Y así fue, me empezaron a temblar más las piernas y mientras el cuerpo se me empezaba a convulsionar, empecé a gemir y gritar que me corría, ¡ohhh! ¡ooohhh! Me corro, me corro, ¡ohhh! ¡ooohhh! ¡ohhh! 
    
       Dios, había soltado 5 potentes trallazos de semen, embarrando aquellos azulejos de los aseos, con el esperma que había soltado como si de un volcán en erupción se tratase.
    
       Joder, el tembleque de piernas que tenía, casi no me dejaban mantener de pie, y el hijo de puta aquel, no paraba de taladrarme el culo. Cada vez iba más rápido y chillaba insultándome, sin dejar de darme por el culo. 
    
       Así maricón, así, córrete como una puta, pedazo de maricón, como gozas con mi polla en tu culo, te voy a dejar bien preñado, pedazo de maricón. 
       ¡Ohhh dios, como aprietas el culito! Pedazo de puta, ¡dios como me exprime la polla tu culito, cabronazo!
       ¡Ohhh que gusto! ¡ohhh que gusto! ¡ooohhh que gusto! Gritaba ensartándome una y otra vez su polla en lo más hondo de mis entrañas, sodomizándome una y otra vez. 
    
       Yo nervioso y agotado, deseaba ...
    ... que se corriera de una puñetera vez. Temía que entrara alguien en los aseos, y nos sorprendieran, y vieran como me tenía aquel hijo de puta, prácticamente desnudo, apoyado a la pared, siendo sodomizado por el hijo de puta aquel.
       Y que pedazo de hijo puta era, me estaba follando salvajemente, de forma magistral, dándome un placer que me estaba haciendo derretir de gusto.
    
       De pronto empezó a darme unas salvajes envestidas que me hacían poner de puntillas, y que prácticamente me levantaban en el aire, y la polla se clavaba en lo más profundo de mis entrañas. 
    
       Me corro, me corro, gritaba el hijo de puta, empezando a eyacular dentro mía, preñándome el culito con su esperma.
    
         ¡Ohhh que gusto! ¡ohhh que gusto! ¡ooohhh que gusto! Gritaba derramando toda su leche en mis entrañas. 
    
       ¡Ay maricón que gusto, ay que gustazo me has dado! Gritaba terminando de eyacular dentro mía, mientras me abrazaba a él, mordiéndome el hombro y lamiéndome y mordisqueando el lóbulo de la oreja. 
       ¡Ay maricón que bueno estás! Que follada más rica que me has hecho pasar. Ahora ya te he preñado esta barriguita, me decía acariciándome el abdomen y retorciéndome y pellizcando los pezones de mis tetillas.
    
       Una vez recuperó el aliento, y de su polla ya no salía nada, fue sacando la polla de dentro de mi culito, y dándome 2 palmadas en los cachetes, me soltó dejando que me vistiera.
    
       Una vez vestido y medio repuesto de la follada que me había dado, fuimos saliendo de aquellos ...
«1...3456»