1. Su gran polla sudada


    Fecha: 28/05/2020, Categorías: Gays Tus Relatos Autor: Logkane, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X

    ... quitó el pantalón y descubrí que no llevaba nada debajo. Ahí comenzó mi trabajo. Empezé a besarle la punta con mucha emoción. Poco a poco bajado por el tronco. Pero el no quería esperar. Me agarró la cabeza, esta vez con dos manos y lsu polla llegó a mi garganta. Empezé a toser un poco. El sabor era increíble, salado y el precum muy espeso. De hecho, lo noté gotear por mi garganta. Me separé y comenzé a respirar. Recuperé mi respiración mientras el me miraba aburrido.
    
    "Aún no has acabado puta", me dijo con una sonrisa macabra. Ví el hilo de precum que colgaba desde su polla hasta mis labios, y entendí que realmente era su puta. El precum era mucho más espeso de lo esperado. Me cubrió la garganta y me di cuenta de que lo tendría que escupir luego. Pero de momento seguí mamando. 
    
    Me empezó a follar la cara bruscamente. Y aunque a mi cerda interior le encantaba, a mis pulmones les costaba respirar. Pronto, soltó mi cabeza, y me hizo comenzar a lamerle esos huevos peludos. El sabor y olor del sudor empezó a ser demasiado, pero seguí, porque me encantaba ser dominado de esta forma.
    
    "Muy bien hecho puta. Ponte a cuatro patas en la cama".
    
    Lo hize con cuidado de que mi polla erect a no tocase la cama y dejase mancha. Ahora, yo estaba secretando precum más de lo que jamás había hecho. Una vez estuve a cuatro, me abrió las nalgss. Temblé con anticipación mientras me metía un dedo cubierto de lubricante.
    
    "Verás cerda, aunque tenga esta polla que tanto te gusta cubierta de ...
    ... tu saliva, aún vamos a tener que meterte esto, porque como ya has visto, es gruesa, y cuando te la meta te va a doler".
    
    "Si amo". Respondí, notando uno de sus vellos públicos en mi lengua. Pronto noté su gran cabeza abrirse camino. Me estiraba el ano con mucha fuerza, u me hacía gemir como una perra, pero de dolor. Me estaba partiendo por la mitad. No pensé que una follada dolería tanto. Abrió mi culito más que cualquier dildoe que hubiese utilizado. Empezó poco a poco, mientras yo casi lloraba, pero luego empezó a acelerar. Cada vez más hondo. Enseguida, de un sólo golpe, me la metió entera. Grité. "Joder"! Solté sin querer mientras me caían lágrimas de dolor.
    
    "Tranquila puta, que esto te gustará más". Empezó a meterme la polla a gran velocidad, y yo exclama a como la cerda que era. No se como ocurrió pero el dolor desapareció y se convirtió el placer, y acabé murmurando las palabras "destrozame el culo porfavor papi".
    
    Agarró mi cuello un uno de sus enormes bíceps y apretó. No lo sufiente para que perdiese la respiración, pero si para que supiese que era mi amo. Pronto, sin ninguna advertencia, note que mi culo se llenaba de su semen. "Ahí tienes putita. Te he preñado". Dijo entre gruñidos. "Te gusta ser preñada por un hombre"?
    
    "Si, gracias"! Grité mientras noté su polla palpitar en mi interior, y su enorme cuerpo sudado agarrandome. 
    
    Me corrí en su cama con un último gélido, y me sussurro al oído. "Lame eso, déjalo bien limpio, y cinco minutos después de que ...