Vida perdida (o encontrada) 1 - Relatos Eróticos

Vida perdida (o encontrada) 1

Con 18 años me fui a vivir con un hombre mayor, él tenía 44, era un comerciante de la zona de frontera entre Perú y Chile. Ante todos me presentaba como su hijo, pero en la intimidad cumplía mas bien el rol de esposa, lo había conocido en Moquegua (sur del Perú) y por rebelde dejé la casa de mis padres y me fui a vivir con él en Tacna, él no era un hombre muy atractivo, era algo grueso de piel trigueña y medía 1.71, su verga era normal, medía 15 cm, pero era muy fogoso en la intimidad, tal vez eso también me convenció a dejar todo e irme a vivir a un barrio pobre, no fue mi primer hombre ya en el colegio había tenido algunas experiencias, pero Gustavo era muy galante conmigo y así me convenció para vivir juntos, yo debía atenderlo en todo, aprendí los quehaceres del hogar: cocinar, lavar, planchar, limpiar y demás, por las tardes yo estudiaba inglés y computación (eran finales de los años 90's). En las mañanas muy temprano le preparaba el desayuno y luego que él se iba yo ordenaba la casa y limpiaba, luego cocinaba y al mediodía le llevaba su almuerzo al mercado, luego yo volvía a la casa y descansaba mientras miraba telenovelas y luego salía a estudiar, al volver lo encontraba a él esperandome para cenar juntos, le chupaba su pinga mientras él miraba television y luego me llevaba a la cama para penetrarme, eso era de lunes a viernes, los sábados él salía a beber cerveza con sus amigos mientras yo lo esperaba en la casa, a veces me aburría y salía a dar unas vueltas al ...

... parque, luego volvía a la casa a esperarlo desnudo, llegaba a la medianoche y se la mamaba hasta que durmiera, luego el domingo, que se quedaba en casa me penetraba al menos 3 veces.

Creo que ese tiempo fui feliz, pero todo terminó por mi calentura: un chico en la clase de inglés llamado Miguel que era mas o menos de mi edad se dio cuenta que yo lo miraba con deseo, era muy atractivo (delgado, blanco y alto), así que poco a poco nos hicimos más amigos y le confesé que yo era gay, a lo que él me respondio que se había dado cuenta desde la primera vez que me vio y que quería cacharme, yo le dije que bien y desde ese día varias tardes lo llevaba a la casa que compartia con Gustavo y teníamos relaciones, asi pasaron varias semanas, hasta que un día mientras Miguel me tenía en cuatro penetrandome sobre la cama veo a Gustavo.

-Así te quería encontrar marica de mierda- me gritó mi marido

-Que haces aqui?- Le preguntaba mientras Miguel salía de mi interior.

-Ya me habían dicho que hacía entrar a un amiguito, todos los vecinos se han dado cuenta lo puta que eres!- Me gritaba.

-Perdoname- Le dije.

-Y tú lárgate de una vez que me las voy a arreglar con el puto este- Gustavo le dijo a Miguel.

-Perdoname, nunca mas volvera a pasar- le suplique de rodillas.

-Yo te ofrecí toda una vida, pero ahora conocerás mi peor lado- me miró con furia y me dio una bofetada.

Una vez que nos quedamos a solas, Gustavo tomó su cinturón y se me acercó, yo quise huir, pero él rápidamente ...