1. Mis deliciosos violadores


    Fecha: 03/07/2017, Categorías: Sexo con Maduras Autor: Anónimo, Fuente: RelatosEróticos

    ... sus dos manos sujetándome a la altura de mis hombros ahora estaba sentado sobre mi a la altura de mi trasero y mi cintura aplastándome con la fuerza suficiente para mantenerme inmovilizada.
    
    Ven, dijo Orlando, de seguro refiriéndose a Jhonatan que al parecer estaba no muy decidido a hacer lo que estaba haciendo.
    
    Por favor, suplique ahora casi a punto de echarme a llorar, porque me hacen esto, mi esposo va a llegar en cualquier momento y no se que va a pasar, dije- con la única intención de que pensaran en esa posibilidad y se asustaran y se fueran
    
    No te preocupes Florencia, de verdad que no te vamos a hacer daño dijo Orlando, con la voz temblorosa no se si de algo de temor o emoción.
    
    Quítale el buzo, jala, le escuche decir a Orlando
    
    En seguida las manos de Jhonatan cogieron mi buzo a la altura de mi cintura empezando a bajármelo.
    
    No, por favor no, deténganse por favor, dije tratando ahora si de conmoverlos, soltando apenas unas lagrimas de rabia e impotencia – pero nada los haría detenerse.
    
    En contados segundos sentí crisparse la piel de mis nalgas que ya habían quedado libres de mi buzo dejando solo mi pequeña trusa rosada que llevaba esa noche tapando mi desnudez.
    
    Sácaselo todo – dijo Orlando – Jhonatan que había dejado mi buzo a la altura de mis tobillos me lo terminó de sacar.
    
    Apúrate – dijo Orlando
    
    Por favor no, por favor, dije casi resignada a lo que de seguro pasaría
    
    Jamás otro que no fuera mi esposo había entrado en mi intimidad, y ...
    ... ahora estaba por experimentar una violación que alguna vez había sido parte de nuestros juegos fantasiosos
    
    De pronto sentí las manos de Jhonatan disponiéndose a quitarme esta vez la trusa y no tardo ni tres segundos, me ruborice en mi posición sabiéndome observada desnuda de la cintura para abajo por Jhonatan y Orlando que de seguro tenia desde su posición sus ojos puestos en mi desnudez.
    
    Apúrate – dijo otra vez Orlando, sube ya
    
    La cama soporto el peso de Jhonatan al subir a la cama.
    
    Mi poca resistencia no pudo evitar que me abriera las piernas mientras se colocaba en medio de ellas. Espera, espera - dijo Orlando- cuando ya sentía a Jhonatan posicionándose sobre mi - métele la lengua para que este mojadita.
    
    Obediente a su jefe – en pocos segundos abriéndome las nalgas con ambas manos en un modo grosero empezó a lamer mi concha de arriba abajo que hasta ese momento estaba sequita, sus salivas humedecieron mis labios vaginales.
    
    No, no lo hagan, ya paren, mi esposo va a llegar, por favor Orlando ya basta, déjenme.
    
    Sigue, sigue hombre, te gusta o no? Que rico culito tiene no, métele la lengua al culo también, ábreselo, comete su culito, mmmmmm, de seguro Orlando estaba relamiéndose mientras veía como Jhonatan me comía la concha. Debo confesar que con la lamida que me estaba haciendo Jhonatan, aun en contra de mi voluntad me iba calentando.
    
    No, no, ya no, para Jhonatan por favor – decía yo – aun con la seguridad que ya no pararían.
    
    Jhonatan quito su cara de ...
«1234...10»