Mis inicios como tranny II, probando semen y cogiendo por primera vez - Relatos Eróticos

Mis inicios como tranny II, probando semen y cogiendo por primera vez

... lo saqué, al contrario, me quedé inmovil por unos segundos mientras le decía a mi primo "imagínate ese pene enorme entrando en el culo de esa chica, lo rico que debe sentirse su culito caliente, húmedo", Miguel sólo volvió a suspirar. Entonces seguí metiendo más su tronco poco a poco dentro de mi ano. Mi esfinter estaba totalmente adolorido pero conforme seguía entrándome en mi, el dolor dió paso al placer, pues las paredes de mi ano se contrajeron y logré ensartarme todo el pene de mi primo, sólo sentía sus testículos tocando los cachetes de mis nalgas. ¿Ahora qué sige? me pregunté pues no sabía qué hacer. Digo, tenía todo ese miembro dentro de mi culo y sólo me quedé sentada en él. Miguel, aún entre dormido y medio despierto comenzó a moverse sacudiéndo su cuerpo, metiendo y sacando su pene de mi culo. Dios, era delicioso, me estaba ahora él dando masaje a mí, su pene me estaba masajeando el culo. 
Yo comencé a seguir el mismo ritmo que él y a darme sentones en su pene, comenzando a gemir como loca "así primo, así, que rico, tienes el pene ...

... exquisito" le decía mientras me tocaba mi pene con una mano y con la otra le acariciaba sus pectorales. "Migue, primo hermoso, dame duro, dame duro por favor, quiero ser tuya" le repetía con los ojos cerrados y gozando al sentir toda su erección dentro de mi.

Mientras más sentones me daba en él, Miguel hacía más fuertes sus arremetidas, las cuales, cuando alcanzaban el fondo de mi ano me lastimaban un poco, pero sólo un poco pues era más el placer. De pronto Miguel entre susurros dijo "me vengo, me vengo Wendy" y empujó su pene hasta el fondo de mi culo y yo sentí como su glande se hinchaba y sentí un líquido caliente bañándome por dentro. Miguel estaba eyaculándo dentro de mi, Dios, era tan rico, yo sólo sentía como enormes chorros de leche inundaban mi colita. Era tal mi excitación que yo también comencé a eyacular, aunque claro, en mucha menor cantidad pero el orgasmo me dejó mareadísima. Había pérdido mi virginidad con mi primo, quien para ese momento abrió los ojos y... bueno les contaré en otro post qué pasó después de que tuvimos nuestros orgasmos.