Tenía que probar - Relatos Eróticos

Tenía que probar

... fuerza pero sin lastimar
Que quisiera arrancarte esto que me dió una buena culeada y me hizo sentir un placer nunca antes imaginado

Con los ojos abiertos por la sorpresa de como le había tomado si miembro se sobresalto, pero yo le mire a los ojos y sin apartar mi vista de los suyos me baje a chupársela, su reacción fue inmediata, sentí como fue creciendo en mi boca y yo la chupa de forma.torpe pero le ví su cara de placer, se recostó de nuevo y se dejó llevar por la mamada que le estaba dando.

-Crei que ya no quería nada más, me habías dicho que no pasaría de nuevo.

-Y no pasará, pero este día lo dispuse a probar algo nuevo y lo seguiré haciendo, quizás mañana ya no, pero hoy me voy a dejar llevar por el gusto de sentir placer a todo lo que da. Esta tarde puedes tener la satisfacción de cogerme todo lo que aguante el cuerpo. Y seguí mamandosela, con sus manos me tomo de la cabeza haciendo que me la tragara toda hasta sentirla en mi garganta provocándome arcadas.

Tome un condón nuevo y se lo coloque, después me monte en el y me abrazo con fuerza pegando su cuerpo junto al mío, me mordía la oreja, el cuello y yo gemía de nueva cuenta como poseído, me tomo de las nalgas y me las azotaba provocándome de nueva cuenta mucho placer, sentía desfallecer y mi cara quedó encima de la suya, en ese momento le bese, le bese con pasión, me contradecía en lo que antes pensaba porque igual sentía que mi mente estaba desfasada con.mi cuerpo, mis pensamientos eran unos y mi ...

... reacción era otra, después de todo ¿Que es el buen sexo sin besos y caricias? Esos besos apasionados me excitaban y lo excitaban más , ahora yo había encontrado un ritmo controlando las metidas y sacas cual puta profesional. Así, entre besos y mordiscos termino desfallecido, yo me recosté a un lado mientras el me abrazaba y besaba mi cuello y espalda, nos quedamos dormidos un buen rato, despertamos  cuando tocaron la.ñierta del cuarto, nos avisaban que el tiempo (4 horas) ya había terminado, ¡Rayos, pensos! Que rápido pasa el tiempo, me cubrí y salí a la puerta, era la chica de lla limpieza quien daba el aviso, al abrir la puerta y verme no pudo disimular su sorpresa, a mi en realidad no me vio entrar, a Alejandro si, pero no me importó, le di el pago de más tiempo y una propina para ella que me agradeció pero antes de retirarse miro hacia adentro buscando con la vistas mi acompañante, quizás quería asegurarse de sus sospechas, si lo vio no lo sé, pero cerré y me acosté al Aldo de Alex de nueva cuenta; ya era tarde y teníamos hambre, y desde la ventana del cuarto se veía a lo lejos el anuncio de una pizzería, hicimos el pedido de una y unas cervezas, tan pronto llegó las devoramos y continuamos con nuestro maratón de sexo, que de hecho cuando la pizza llegó, nos estábamos dando gusto con un 69 espectacular, yo montado encima de el chupando su verga y el chupando mi verga, huevos y culo.

Una vez que comimos, el me empezó a dar una mamada exquisita, que me hizo acabar pronto, su ...