Amor en el conventillo
Fecha: 24/12/2017,
Categorías:
Hetero
Autor: rehott, Fuente: RelatosEróticos
... caricias.
Gianluca se apartó por un momento para poder observarla a Pilar, se sentó en la silla y contemplaba sus senos y precisamente sus hermosos pezones a los que se le pronunciaba una erección importante y en consecuencia se marcaban en el vestido de Pilar. Sus manos comenzaron a acariciar su hermoso y firme trasero, con unas nalgas bien pronunciadas que llevaban a la más dura erección que haya tenido ese hombre en toda su vida.
Así fue como le bajó su bombacha y rozó su vagina, que para ese entonces estaba completamente mojada y caliente.
Le levantó la pollera, le acariciaba sus piernas, y le pidió que con toda su mano le acariciara el pene con movimientos suaves, ordenados, con un vaivén que lo hacía poner, duro, caliente, rojo y palpitante, emanando gran cantidad de líquido pre seminal.
En un momento, él le agarró las manos, la llevó hasta la cama, le quitó absolutamente toda su ropa y empezó a besarla nuevamente, primero por la cara, luego por el cuello, después sus pechos, rozando sus enormes y erectos pezones rosados con la punta de su lengua muy suavemente pero con mucha saliva. Ella gemía como loca por semejante placer.
Siguió besándola hasta llegar a su exquisita vagina, Un lugar maravilloso de indescriptible belleza, totalmente depilada y emanado gran cantidad de su riquísimo néctar, que Gianluca probó rozándole su lengua. Cada envestida que le propinaba con su boca a la vulva hacía que se ponga cada vez más caliente y rosadita, Pilar ...
... desfalleciendo de placer, temblando se paró y mirando fijamente el gran pene de Gianluca se ubicó cómodamente entre sus piernas, las abrió y comenzó a lamer desde los enormes testículos hasta la punta del pene, con suavidad y calma, cuando sus labios y lengua pasaban por el glande, él gemía muy fuerte y ella se quedaba un poco más ahí, y de vez en cuando lo miraba a los ojos.
Pilar nunca dejaba su lengua quieta, pero todos los movimientos eran producidos con mucha calma, Gianluca gozaba como nunca antes lo había hecho en su vida.
El pene se encontraba muy erecto, rojo y muy lubricado, ella seguía haciendo la felación y jugando suavemente con sus testículos.
Después empezó a pasar la lengua extendida por el frenillo, dándole pequeños golpecitos con la misma y besaba con sus labios toda la zona del glande.
Él ya no aguantaba más, ella empezó a succionar más rápido, mientras lo agarraba de los muslos y en un momento se escuchó un estremecedor grito de placer y borbotones de néctar llegaron a la boca de Pilar, quien lo recibió con gratísimo placer hasta su última gota.
Después lo miró a los ojos se sonrió y le pidió con su mirada que la penetrara. Él seguía todavía muy excitado, su miembro de veinte centímetros estaba muy tieso y lo introdujo en la estrecha vagina de Pilar y llegaron a un gran orgasmo.
Así pasaron toda la tarde y parte de la noche, amándose sin descanso.
Con el correr del tiempo Gianluca, compró un terreno en el barrio de Flores y fue edificando una ...