1. Las inyecciones


    Fecha: 28/12/2017, Categorías: Voyerismo Autor: lidiavision, Fuente: CuentoRelatos

    Gahel: hola Lidia.
    
    Lidia: hola Gahel.
    
    G: como te va?
    
    L: de la fregada amigo.
    
    G: pues que te pasó?
    
    L: me dio gripa y me inyectaron.
    
    G: jajaja y tu tan miedosa a eso.
    
    L: pero ahora si me dio fuerte, hasta un doctor vino a revisarme.
    
    G: uy que caray, y desde cuando te dio?
    
    L: desde el sábado, pero oye... tu sabes poner inyecciones?
    
    G: no, por?
    
    L: es que me dio mucha pena que me inyectaran.
    
    G: por que?
    
    L: es que el doctor sólo me dio la receta pero no me inyectó, me dijo que consiguiera a alguien, y pues ya en la farmacia mi esposo y yo nos encontramos al vecino y nos preguntó que por qué medicamento veníamos. Pues ya le dijimos y nos comentó que el sabe inyectar, y así que le dijimos que si.
    
    G: orale, y que más?
    
    L: pues esperamos a que llegara el vecino a nuestra casa y lo hicimos pasar, ya eran como las 6:00 pm.
    
    G: en donde lo pasaron?
    
    L: pues hasta nuestra recámara.
    
    G: ok y que más?
    
    L: pues me preguntó que si alguno de los dos sabía poner inyecciones, pero pues le habíamos dicho que no, entonces me dijo que sería algo rápido.
    
    G: pues si, un piquete y ya.
    
    L: pues si pero nos dijo que el se iba a sentar en la cama y me dijo que me acercara a el.
    
    L: tomó el alcohol y lo destapó, me dijo que me lo iba a untar para desinfectar y disminuir el dolor del piquete.
    
    G: claro.
    
    L: pero ahí viene lo vergonzoso.
    
    G: por?
    
    L: me dijo que me tenía que untar alcohol en las pompis, me dijo que me acercara a el y me ...
    ... bajo el pants.
    
    G: como crees!
    
    L: pero como yo traía tenis no me salió el pants, me dijo que me sentara en la cama y el me ayudó a quitarme los tenis.
    
    G: Y no te dio pena?
    
    L: pues si pero que podía ya hacer? y pues ya sólo en calcetines me volvió a poner de pie.
    
    G: que dijo tu esposo?
    
    L: nada, solo se quedó viendo, ya ves que el también es muy miedoso a las inyecciones.
    
    G: si recuerdo que también dijo alguna vez eso.
    
    L: y pues ya en frente de el, se sentó en la cama y me bajo los calzones.
    
    G: pero no todos verdad?
    
    L: pues no, hasta la rodillas pero como me hizo moverme a un lado de la cama se me cayeron.
    
    G: jajaja, no manches, osea te vio de frente, jajaja.
    
    L: pues si pero ya a un lado de el me hizo acostarme boca abajo, me dijo que me acostara en sus piernas de manera que yo quedara con mis caderas sobre sus piernas.
    
    G: ok, y ahí te inyectó?
    
    L: noooo, me empezó a untar el alcohol en mis pompis.
    
    G: aaaaa para desinfectar verdad?
    
    L: si.
    
    G: cuanto tiempo tardó untándote?
    
    L: no se pero me untó dos veces, pero cuando terminó se sentía frío.
    
    G: pues claro, así es el alcohol.
    
    L: pues si pero me dejó así un rato.
    
    G: por que?
    
    L: dijo que para que se secara.
    
    G: pues que te untó mucho?
    
    L: si.
    
    G: pues si, más vale... y ya te inyectó?
    
    L: si pero me tuvo así en sus piernas mientras preparaba la inyección.
    
    G: acostada así con tus nalgas expuestas?
    
    L: si.
    
    G: orale, tu esposo que decía?
    
    L: nada, de hecho ...
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