A mis 18 años fui desvirgado por mi amigo.
Fecha: 19/12/2020,
Categorías:
Gays
Tus Relatos
Autor: Danisampedro91, Fuente: Relatos-Eroticos-Club-X
... noche iba a acostarme totalmente desnudo. Quería repetir lo de la noche anterior y quería estar ya dispuesto para que mi amigo me volviera a hacer suyo.
Cuando me fui a acostar, él ya estaba metido en la cama, separé las cobijas para meterme en ella, viendo que él también estaba desnudo por completo. El muy cabrón ya me estaba esperando, sabía que me había gustado lo que me había hecho la noche anterior y que moría en deseos por repetir aquello. Quería ser suyo de nuevo, quería ser su putita y que me hiciera suyo nuevamente.
Me acosté y mientras me tapaba con la ropa, me fui acurrucando a él. Ahora como bien me había dicho él la noche anterior, ahora sería yo el que, con mi culito, iría en busca de aquel pollón que tanto me iba a hacer disfrutar.
Me fui acurrucando a él, y tan pronto estuve pegado a su pecho, fui girando hasta que mi culito quedó pegado a su entrepierna. Empecé a mover mi caliente y desesperado trasero por todo su sexo, hasta que él viendo lo caliente y desesperado que yo estaba, me rodeó con sus brazos, y mientras empezaba a menear mi empalmada polla con una de sus manos, llevaba la otra a mi abdomen y pecho, acariciándolo a la vez que me susurraba, ya mi putita ya, no desesperes. Tranquilo que esta noche y todas las noches que nos quedan, te haré mío. Te daré por este culito tan caliente y vicioso que tienes y te dejaré preñado con mi lechita.
Me estuvo Calentando y excitando durante un buen rato, haciendo que yo me desesperara ...
... por volver a sentir como me daba por el culo y me hacía suyo. Quería sentirlo dentro de mí y ardía en deseos.
Tan pronto me tuvo bien excitado, lubricado y listo para ser enculado de nuevo, acostándome boca abajo, se colocó sobre mis piernas, y abriéndome estas, empezó a penetrarme.
¡Ohhh! ¡ooohhh! ¡ooohhh ohhh! Gritaba yo gimiendo como una perrita en celo, sintiendo como aquel pollón que tanto me gustaba, se iba introduciendo en mí.
Esa noche volví a ser suyo, volviendo a quedarme preñado con su semen, al igual que la noche anterior y el resto de los días que estuve trabajando y viviendo con él.
Nunca fuimos de besos y palabras cariñosas, apenas nos decíamos nada, solo nos acostábamos después de salir del trabajo y luego de darnos una ducha. Ya no nos poníamos el pijama, los 2 nos acostábamos desnudos por completo, yo que era siempre el último en hacerlo, separaba las cobijas, me metía en la cama y ya me acurrucaba a él, esperando a que él me montara y me hiciera suyo como todas las noches.
Esta es la historia real que vivió cuando tenía 18 años y fue a trabajar a Suiza con su amigo, durante un mes que estuvo de vacaciones universitarias, Carlos Casallachs.
Él me escribió contándola y diciéndome que, si yo quería y me gustaba, podía escribirla y publicarla con su permiso. Y como a mí me gustó, pues eso es lo que he hecho, esperando que a vosotros también os guste y podáis disfrutar con ella.
Si queréis contactar o escribirme, lo podéis ...